Tegucigalpa – La economía hondureña insiste en evadir las crisis políticas que le salen en el camino este 2018, y aunque su crecimiento será menor, igual mantendrá su avance este año y el próximo, coinciden organismos internacionales y economistas nacionales.
– A pesar de ello, el país crecerá de acuerdo al FMI y economistas nacionales.
– Calificadoras de riesgo apuestan por mantener la misma calificación de riesgo soberano.
Primero fue la crisis política surgida tras las elecciones hondureñas de noviembre del 2017, que llevó a la oposición a no reconocer sus resultados y con ello a organizar una serie de manifestaciones que obstaculizaron el normal desenvolvimiento de las fuerzas productivas.
Durante los primeros meses las ciudades hondureñas se encontraban bloqueadas por las tomas de los militantes de la oposición, con la esperanza que la presión hiciera revertir el resultado final de las elecciones, donde el organismo electoral dio ganador al actual presidente Juan Orlando Hernández.
Pero cuando el panorama hondureño se estabilizó, a la economía nacional le apareció otra crisis política esta vez en el frente externo, ya que el vecino Nicaragua se encuentra sumergido en un enfrentamiento entre el gobierno y la población que reclama la salida dupla presidencial que conforman el matrimonio entre el presidente Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo, que ocupa la vicepresidencia.
La crisis política, que lleva ya más de dos meses, se ha cobrado la vida de cerca de 300 personas, pero también ha golpeado la economía nicaragüense, pero también la de sus vecinos, incluido Honduras.
Nicaragua representa el mercado donde tradicionalmente se tiene un superávit en el comercio bilateral, pero también sirve de tránsito para las exportaciones e importaciones vía terrestre a Costa Rica, otro importante socio comercial.
El efecto de la crisis de Nicaragua se traduce en pérdidas diarias de 70 millones de lempiras, de acuerdo a los empresarios nacionales.
La crisis nicaragüense no avizora un final a mediano plazo, de manera que todavía los economistas no estiman el impacto que tendrá en el crecimiento económico hondureño y regional.
FMI da certeza de crecimiento
El Fondo Monetario Internacional (FMI) publicó recientemente su informe sobre el Artículo IV de la economía hondureña y sus expectativas para el 2018 y 2019, los cuales están a tono con lo señalado en el Programa Monetario divulgado por el Banco Central de Honduras.
El Fondo destaca que el año pasado la economía creció 4.75 por ciento del producto interno bruto (PIB) y proyectó que para el actual 2018 y el 2019 la misma crecerá, aunque a una tasa menor, del 3.75 por ciento.
Pero el FMI no solamente señala la crisis política como elemento que induce a una desaceleración económica, sino también factores externos como el bajo precio del café en el mercado internacional y los altos precios del petróleo.
El economista nacional Guillermo Matamoros coincide con el fondo en cuanto a una desaceleración económica, pero espera que el segundo semestre exista mayor dinamismo económico.
Firmas de riesgo apuestan por estabilidad
Mientras la firma de análisis de riesgo Moody’s confirmó la nota que tiene el país en cuanto a calificación de riesgo en relación al año pasado.
Honduras tiene una calificación de B1 con perspectiva estable otorgada por Moody’s y a pesar de la crisis política mantuvo la misma para el 2018.
El país está a la espera del informe que realice la otra agencia calificadora Standard & Poor’s que ya realizó en análisis de la economía y que tanto economistas, como autoridades esperan que la misma mantenga la nota del año pasado.