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Dictan otro requerimiento contra Bográn

Tegucigalpa – Marco Bográn enfrenta el segundo requerimiento fiscal que parece ser solo uno más de los que el Ministerio Público podría dictarle, debido a que las líneas de investigación que comprometen su periodo como director de Inversiones Estratégicas de Honduras (Invest-H), son cerca de una veintena.

Fue la Fiscalía Especial para la Transparencia y Combate a la Corrupción (Fetcco) y la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic), las dependías del MP que presentaron este martes el nuevo requerimiento contra Bográn, esta vez,  por el supuesto delito de violación a los deberes de los funcionarios.

La medida obedece que el exdirector de Invest-H otorgó a uno de sus tíos, Napoleón Bográn, un contrato para supervisar una obra vinculada con el establecimiento de un hospital móvil que se espera llegará al occidental departamento de Copán, en el contexto de siete sanatorios comprados a Turquía, mismos que aún son objeto de contradicciones y de un enorme vacío en Honduras, a cerca de siete meses de que el país afronta sin tregua, la presencia del COVID-19.

Las investigaciones, indica la Fiscalía en su comunicación oficial,muestran que Bográn sin haber sometido a aprobación otorgó a la empresa CINSA, misma en la que su tío es socio propietario, la supervisión de una obra en el lugar donde se edificaba el plantel en Santa Rosa de Copán, para el funcionamiento del citado nosocomio móvil.

El contrato tiene un valor de un millón 200 mil lempiras y esa suma fue pagada aun sin que la obra fuera concluida, indica el MP.

La Ley de Contratación del Estado en su artículo 15 numeral 6, no se puede contratar a parientes en el cuarto grado de consanguinidad o segundo de afinidad.

El contrato fue otorgado a Napoleón Bográn el 26 de marzo de este año, cuando el COVID, empezaba a mostrar su presencia en Honduras.

En la cárcel

Marco Bográn guarda prisión en una unidad militar en Tegucigalpa, desde hace dos días, cuando junto con el exadministrador de Invest-H, Alex Moraes, fueron requeridos a solicitud del MP por el delito de defraudación de caudales públicos.

Este caso está vinculado al despilfarro de algo más de un millón de lempiras que fueron usados para hospedar en un hotel de lujo a funcionarios de Invest-H que realizaron una gira en zonas hondureñas y a su regreso hicieron cuarentena “VIP”, cuando ya había una unidad de monitoreo, instalada por el sistema sanitario público, en la que pudieron acogerse, argumenta el MP.

La noticia generó gran expectativa en Honduras, porque Invest-H ha estado en el ojo de la ciudadanía tras las denuncias públicas de organismos de sociedad civil quienes han develado una serie de actos de presunta corrupción que abarcan diversos procesos de adquisición en el marco de la pandemia.

Lo más sensible del caso han sido la compra de los siete hospitales móviles a una empresa turca, usando para ello a un gris intermediario guatemalteco, que, según los informes, es el que dirige en La Florida, Estados Unidos, la empresa media que gestó la operación, llena de sospechas.

Los hospitales en su mayoría aún no llegan a Honduras. Apenas dos de ellos entraron por Puerto Cortés hace tres meses, pero ninguno funciona aún.

Los otros están en un limbo de informes poco coherentes que se han descontinuado de parte de la junta interventora de Invest-H.

Otros casos vinculados con compras de mascarillas e implementos sanitarios son parte de las amplias investigaciones del caso.

Invest-H permanece así en el centro de los pendientes de presunta corrupción que están por desentrañar en Honduras, en el marco de una pandemia que aún está instalada con fuerza en todo el país y que ya cobra 2,433 vidas y 80,020 casos de contagios.(PD)

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