– Dijo estar firme para sancionar la Ley de Reconversión de la Deuda Pública.
– Antes no se investigaba nada y ahora se resuelven los crímenes, destacó.
– Es difícil combatir el crimen con el enemigo adentro, afirmó el gobernante.
“Para los comicios generales de noviembre hay ocho candidatos, todos son buenos, pero hay uno que ya estuvo y mire el terrible problema que nos dejó”, aseveró en alusión al ex presidente de Honduras y coordinador del Partido Libertad y Refundación (Libre), Manuel Zelaya.
Lobo insistió que el candidato de su partido es el más fuerte y que no duda que la gente lo premiará con el voto, aunque aclaró: “Me parece injusto que el nacionalista diga que no votará por Juan Orlando Hernández por el presidente Porfirio Lobo”.
El primer ciudadano del país ofreció sus declaraciones desde el “Altar Q” en el programa televisivo “Frente a Frente” que dirige el periodista Renato Álvarez.
El mandatario hondureño expresó que por mucho tiempo calló lo que le tocó enfrentar porque consideraba que hacer lo contrario no le abonaba en nada al país.
Insistió que cuando tomó las riendas del país en 2010 había anarquía en las calles y pidió comparar lo que sucede ahora. “No tienen idea de todas las humillaciones que sufrí en ese tiempo como presidente, perdimos dos años en esa tarea”, reiteró.
Calificó como “un desastre y un desmadre” lo que le heredaron Manuel Zelaya y Roberto Micheletti y recordó que recibió con un -2.9 por ciento en el tema de crecimiento económico.
Excusó que perdió tiempo en lograr el reconocimiento internacional, período que habría ocupado para hacer otros proyectos. También apuntó que saldrá con los mismos bienes con los que entró al gobierno.
El dignatario destacó los avances en Educación y dijo que se ha logrado la gobernabilidad del sistema.
Recordó que en un inicio tuvo problemas con dirigentes de su partido por el nombramiento de Marlon Escoto al frente de Educación. “Pero valió la pena porque hemos recuperado la autoridad en Educación y estoy muy satisfecho”, acotó.
Sobre la continuidad de Escoto para el próximo gobierno, comentó: “Si se toma una decisión equivocada podemos volver a como estábamos antes, si le puedo sugerir algo al próximo gobierno es que analicen bien esa decisión”.
Sobre la Ley de Reconversión
El gobernante Lobo minimizó las críticas a la recién aprobada Ley de Reconversión de la Deuda Pública y añadió que los beneficios los recibirán las siguientes administraciones.
Explicó que el decreto no ordena un procedimiento único. “Hay tres rutas a seguir, una con Ingeomin (Instituto Nacional de Geología y Minería), otra con Coalianza, o la ruta que plantea el decreto vía la Secretaría de Finanzas que la traslada al Banco Central de Honduras como fiduciaria”.
Justificó que con la aprobación de la Ley de Reconversión, el gobierno no pierde y las empresas asumen su propio riesgo. “Hay 280 concesiones mineras que se han dado y que no sabe si se están usando. No es justo seguir otorgando concesiones y arriesgando todo nosotros, lo importante es que la empresa que invierta se arriesgue”, apuntó.
Detalló que todo lo que se haga en el marco de la referida norma es en base a la Ley de Minería actual y todos los recursos van al pago de la deuda.
“Voy a empezar a halar las hebras para ver quienes se oponen y quienes están a favor, la ley no es un cuello de botella porque pueden usar el método que ellos prefieran y ya hay muchos inversionistas que han mostrado interés de invertir en Honduras”, dijo Lobo.
Reconoce errores
Lobo reconoció la alta criminalidad que azota al país y expresó que “acepto que he cometido errores y no pretendo ser Dios, todos los días le pido a Dios que me ayude y tengan la seguridad que cuando me vaya, me iré sin resentimientos con nadie”.
Mencionó que en lo que va de 2013, se reportan 56 municipios con cero homicidios, situación que lo mantiene contento.
Destacó los avances en la depuración de la Policía Nacional y otros operadores de justicia, al tiempo de apuntar que “es difícil combatir el crimen con el enemigo adentro”.
Refirió que hasta hace unos años los crímenes no se investigaban en Honduras, pero en la actualidad la cosa es diferente. “Ahora rápidamente se da respuesta”, dijo.
Finalizó que “estoy contento porque el próximo presidente no va a enfrentar lo que yo sufrí”.