spot_img

Honduras bajo el fuego de la izquierda latinoamericana

Tegucigalpa/Sao Paulo – La izquierda latinoamericana cerró su encuentro anual en el llamado Foro de Sao Paulo y desde ya definió su objetivo expansionista: Lograr hacerse con el poder en seis países, comenzando con Honduras y continuando con Chile, El Salvador, Colombia, Costa Rica y Panamá y para ello han diseñado toda una estrategia que ya está en marcha en este país centroamericano.
 

El Foro de Sao Paulo define la estrategia para “vencer” a la derecha hondureña en los comicios de noviembre a través de Libre.

Igualmente buscarán reforzar a Libre por medio de un “foro” para “analizar la democracia”.

Lo anterior es la principal resolución del referido Foro en su declaración final del XIX encuentro y que coloca nuevamente al país bajo los faroles de la izquierda continental, con el fin de lograr en esta ocasión lo que no concretaron hace cuatro años con la IV Urna que impulsó entonces el presidente Manuel Zelaya.

La izquierda ya tiene en la mira a Honduras y definió claramente su enemigo al señalar a la “derecha” latinoamericana, para lo cual buscan “enfrentar y vencer las disputas electorales con la derecha”.

La declaración define las “tareas por cumplir” de la izquierda latinoamericana como es ganar “particularmente las elecciones en Honduras, Chile, El Salvador, Costa Rica, Colombia y Panamá”.

Con ganar las elecciones en Honduras se refieren a un triunfo del Partido Libertad y Refundación (Libre) encabezado por el ex presidente Manuel Zelaya y que postula como su candidata presidencial a su esposa Xiomara Castro.

La apuesta de la izquierda latinoamericana por Libre, es una continuación de todo el apoyo que le brindaron a Zelaya cuanto intentó convocar a una asamblea constituyente para reformar la Constitución que permitiera la reelección permanente.

En el foro participan los representantes de los partidos que gobiernan en Brasil, Ecuador, Argentina, Venezuela, Bolivia, Uruguay, Nicaragua y en su momento Chile, que fueron los que apoyaron a Zelaya el 2009 para que retornará al poder, del cual había sido separado.

Honduras en la mira

De todos los países que acudirán a procesos electorales, Honduras es paradigmática para la izquierda regional y en especial para su facción radical representada por el “chavismo” aglutinado en la Alba.

Honduras fue el país donde el proyecto expansionista que impulsó el fallecido Hugo Chávez no acertó, pero los pro albistas en las elecciones hondureñas de noviembre próximo buscan la oportunidad de reiniciar su estrategia expansionista.

Un triunfo de Libre del ex presidente Zelaya significaría un impulso para los partidos izquierdistas aglutinados en el Foro de Sao Paulo, ya que impulsaría sus movimientos en el resto de países, donde las opciones de la izquierda son mínimas.

Excepto Chile, donde la ex mandataria Michelle Bachelet lleva las ventajas en las encuestas, pero la nación sudamericana tiene sólidas instituciones republicanas que incluso los casi 20 años de gobiernos de la concertación no cambiaron el modelo de economía libre y respeto institucional.

Colombia, Costa Rica y Panamá tienen izquierdas sin opciones electorales, mientras en El Salvador la lucha es cerrada con la derechista Arena.

Al igual que Chile, el ascenso del FMLN en El Salvador no provocó cambios en la economía libre, ni en la institucionalidad del país vecino.

Por ello la izquierda chavista pone especial énfasis en Honduras, donde creen tener mayores opciones, especialmente por la atomización de las fuerzas derechistas.

“Observadores” de Unasur

Como parte de su estrategia de influencia para su proyecto expansionista, la izquierda que controla la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) planea hacer uso de esta instancia política para presionar a Honduras.

Desde el Foro de Sao Paulo salió la tesis de enviar observadores a los comicios de Honduras, con el fin de presionar a favor de Libre, al Tribunal Supremo Electoral (TSE).

Aunque normalmente Honduras invita a la Organización de Estados Americanos (OEA), para que en nombre de todo el continente certifique los procesos, Unasur virtualmente se autoimpuso como “observador” electoral, sin que se le haya invitado.

Tampoco está claro quiénes serán los “observadores” que envíe la Unasur, ya que es común que destaquen muchos dirigentes de la izquierda sudamericana.

Lo curioso es que los que más presionan por los “observadores” electorales no toleran en sus países que haya vigilantes internacionales tal como sucede en las naciones controladas por el chavismo.

Capacitación

Igualmente el Foro de Sao Paulo buscará realizar un foro sobre la democracia hondureña, lo que muchos analistas lo consideran como una máscara para enviar centenares de activistas internacionales para capacitar a los dirigentes de Libre.

Frente a tal perspectiva, hay temor que entre los capacitadores vengan instructores para realizar movimientos violentos.

También vendrían activistas del FMLN de El Salvador y el sandinismo de Nicaragua, algo que arroja dudas entre lo que es un “observador” y lo que es la injerencia en temas netamente hondureños.


spot_img
spot_img
spot_img

Noticias recientes

spot_img
spot_img