Tegucigalpa – El director de Fiscales del Ministerio Público, Rolando Argueta, manifestó que debido a la lentitud en las actuaciones es que se ha procedido a efectuar cambios en la fiscalía especial de Lucha Contra la Corrupción.
Indicó que la Fiscalía General en compañía del equipo de trabajo han decido dar un giro a los mecanismos mediante los cuales se aborda el tema de la corrupción en el país y ha emitido un nuevo reglamento que crea nuevas estructuras a lo interno de la fiscalía especial de Lucha Contra la Corrupción, comenzando por cambiarle el nombre.
En sentido, ahora se conocerá como fiscalía especial de Transparencia y Combate a la Corrupción Pública y Argueta considera que el nuevo reglamento, vendrá a ayudar ostensiblemente en el mejoramiento en el combate a los casos de corrupción y hacer más rápidas las investigaciones para proceder al enjuiciamiento de las personas involucradas.
El funcionario señaló que muy probablemente habrá cambio de fiscales en esa dependencia, aunque indicó que hay satisfacción con el trabajo su titular Ricardo Matute y con el de la coordinadora Elsa Calderón.
“El problema no es de personas sino de carácter instrumental o normativo que impide a los fiscales, por dinámicos que sean, sacar las diligencias de investigación de manera pronta y eficaz; lo que se vislumbramos y queremos hacer es fortalecer la fiscalía especial de Transparencia y Combate a la Corrupción Pública mediante el nombramiento de al menos otras 10 fiscales en Tegucigalpa y otros seis en San Pedro Sula”, detalló.
Arguyó en todo el país apenas operan 20 fiscales para investigar los casos de corrupción y ahora se pretende elevar la cantidad a entre 35 y 40 fiscales y proceder al nombramiento de la parte técnica que tiene mucha importancia en la investigación de estos temas por cuanto se necesita de profesionales de la economía, finanzas, peritos mercantiles, licenciados en administración aduanera y otros con conocimientos específicos.