El director de comunicaciones de Unicef para Honduras, Héctor Espinal, recordó que en 2011 registraron 947 homicidios de menores de 18 años, mientras el presente año estará cerrando con 2 mil 15 decesos, de acuerdo a la tendencia hasta este mes de noviembre.
“Esto significa que se duplicó la cantidad de homicidios en el país y es un problema grave que estamos teniendo, especialmente porque es la vida de los niños las que están en juego, afirmó Espinal.
Detalló que la mayor parte de las muertes violentas de los jóvenes se dan con armas blancas o el uso de pistolas.
Espinal lamentó la apatía gubernamental para resolver estos crímenes y recalcó que el 90 por ciento de las muertes ni siquiera han sido judicializadas. “Eso significa que estamos fallando en la investigación, que estamos fallando como operadores de justicia y las familias están quedando en una aptitud de reclamo por la falta de castigo a las personas que cometen estos delitos”, concluyó.