París– El presidente francés, François Hollande, ha llegado a la sala de conciertosBataclan, en la que esta noche han muerto decenas de personas tras la intervención de la policía para acabar con una toma de rehenes.
Junto a Hollande, se desplazaron al lugar el primer ministro, Manuel Valls, y los titulares del Interior, Bernard Cazeneuve, y Justicia, Christiane Taubira.
La toma de rehenes en la sala de conciertosBataclande París ha terminado con un asalto policial y la muerte de dos terroristas, según informa el canal de televisión «BFMTV».
En el interior de la sala se ha cometido una auténtica «carnicería», según esa misma televisión.
Los terroristas dispararon a mansalva sus rifles AK-47 contra los presentes en la sala, que asistían a un concierto del grupo de rock The Eagles Death Metal.
Los atacantes llegaron vestidos de negro y con la cara al descubierto y expresaron la frase de ataque que usan los islamistas «Alá es Grande».
Al menos 40 asistentes escaparon de la sala de conciertos, incluyendo un periodista, y están a la espera de rendir sus declaraciones a la policía.
