El animal presentaba una pata rota por varias partes, una infección en los huesos y heridas de perdigones en el cuerpo, además de numerosos parásitos, cuando fue encontrada la semana pasada y trasladada al Special Veterinary Servicies (SVS) del citado condado, donde se recupera de las heridas.
Laura Braun, la veterinaria que atendió a la gata, explicó que un animal en las circunstancias de «Laurel» habría sido sacrificado, pero que esta gata tenía «una especial voluntad por sobrevivir», hasta el punto que se ha convertido en la «favorita del equipo del hospital».
Braun apuntó que el animal necesitará todavía al menos dos meses de recuperación hasta encontrarse lo suficientemente fuerte como para pasar por el quirófano, aunque es probable que haya que amputarle una pata.
Varios miembros del personal del centro veterinario se han ofrecido para adoptar a la gata.
«Ella (la gata) ha pasado una vida tan dura y ha estado tan necesitada de cariño que ahora, finalmente, puede que lo consiga», apostilló la veterinaria.
La organización sin ánimo de lucro Animal Refuge Center (ARC) está recogiendo fondos para sufragar los gastos de la intervención quirúrgica, que pude rondar los 10.000 dólares.