Tegucigalpa – Familiares, amigos y compañeros de armas, retiraron en las últimas horas de la morgue capitalina el cuerpo del subinspector de la Policía Nacional, Gredys Arsubi Bardales Meza, quien fue encontrado el miércoles en estado de descomposición en la aldea El Rincón en la carretera que conduce de Siguatepeque a Jesús de Otoro, Intibucá, occidente de Honduras.
El oficial había sido reportado como desaparecido desde el fin de semana pasado y fue encontrado muerto entre unos matorrales de la aldea El Rincón.
Bardales Meza fue visto por última vez el pasado viernes en la tarde cuando se dirigía a su vivienda ubicada en Camasca, Intibucá, al salir de fin de semana libre.
Ante el atroz crimen, los familiares del oficial piden a las autoridades que se haga justicia en este caso y se respete la memoria del subinspector.
Waleska de Bardales, esposa del subinspector pidió que la Policía esclarezca cuál fue el móvil del crimen al tiempo que pidió a las personas que conocieron a su marido que lo recuerden como lo conocieron y hagan caso omiso a comentarios que trascienden en redes sociales.
“Para mí era un hombre honorable, intachable, él fue un buen hijo, un padre ejemplar, un gran esposo, un gran cuñado y un gran yerno”, acotó.
Tras retirar su cuerpo, los restos morales del oficial fueron trasladados hasta el municipio de Meámbar, Comayagua, donde será velado y posteriormente sepultado.
Según el informe policial, la víctima vestía una camisa tipo polo azul oscuro, pantalón beige y unos zapatos tipo burros negros, ropa que coincide con la que usaba el policía. Bardales Meza estaba asignado como instructor en el Instituto Técnico Policial (ITP).
