Almendarez Amador fue recapturado en los momentos en los que junto a un abogado brindaba una rueda de prensa para declararse inocente de los cargos que le imputa la policía.
La rueda de prensa la ofrecía en las inmediaciones de las instalaciones policiales donde había guardado prisión horas antes.
Hasta el lugar llegó el jefe de la Policía de Investigaciones a recapturarlo.
El jefe policial dijo que ejecutaban la acción tras obtener una orden de captura de parte de los tribunales competentes, tras accreditar nuevos indicios relacionados con el caso.
La Fiscalía de Delitos Comunes liberó esta madrugada al supuesto autor material de la muerte del comunicador y humorista acontecida el pasado 18 de octubre.
El supuesto homicida, identificado como German David Almendarez Amador, fue dejado en libertad por la fiscal de turno, Gea Garay, sin embargo, se desconocen los argumentos que valoró la funcionaria para ordenar la libertad del imputado, que según las autoridades, forma parte de una banda de sicarios que opera en la capital.
Almendarez Amador, según la policía, fue capturado en el sector del Picachito en el oriente de la capital y se le decomisó un arma nueve milímetros, con la que supuestamente dio muerte al comunicador el pasado jueves 18 de octubre frente al edificio de Radio Cadena Voces en el bulevar Morazán.
La liberación del imputado causó sorpresa en círculos policies porque aseguraron haber acreditado todas las evidencias que apuntaban a que el detenido era el responsable del asesinato del periodista.
El jefe de la Dirección General de Investigación Criminal (DGIC), Francisco Murillo, entrevistado por RCV dijo “estar sorprendido” por la decisión de la fiscal porque habían suficientes pruebas que involucraban al detenido en el asesinato de Carlos Salgado y aparentemente no las valoró.
Afirmó que fue una decisión apresurada y que los fiscales al parecer no leyeron el expediente.
Dijo, por ejemplo, que la fiscal aparentemente no valoró el testimonio y la identificación que hizo el testigo protegido, así como el arma nueve milímetros que se le decomisó al supuesto asesino y que tenía reporte de robo.
«A traves de medicina forense íbamos a ratificar el uso de esta arma, incluso esa arma fue identificada por las personas que estuvieron en el lugar de los hechos».
Murillo expresó su preocupación porque la fiscalía no espero que la policía agotara las investigaciones y concluyeran los seis días que establece la ley para enviarlo a la Penitenciaría Nacional o liberarlo en caso que no existieran las suficientes pruebas que lo inculparan.
Informó que anoche recibieron una llamada de la fiscal de turno para que se enviara al imputado a las oficinas de esa dependencia, pero en ningún momento dijeron que era para liberarlo, lo que genera una serie de interrogantes y deja el caso en punto cero, es decir, tal como estaba.
Tras conocer de la liberación del imputado, el director de RCV, Dagoberto Rodríguez, expresó su preocupación porque, dijo, posiblemente pudo tratarse de un montaje de la policía para atenuar las críticas que se le venían haciendo en los últimos días o que alguien con el suficiente poder, y que tuvo que ver en el asesinato de Salgado, haya ordenado su liberación.
Más tarde, Rodriguez dijo estar satisfecho por la acción policial y confió en una investigación profunda que lleve a aclarar completamente este caso.
Dijo que esperará que las autoridades de la Fiscalía General de la República y la policía den repuestas a la sociedad y a los familiares de Carlos Salgado por este hecho y reiteró que seguirán exigiendo a la Secretaría de Seguridad que concluya este caso y que no suceda como el del edecán presidencial Alejandro Motiño y de otros miles de hondureños, que han quedado en la impunidad.
La detención del supuesto asesino del periodista de RCV ocurrió precisamente un día después de que periodistas de esa radio emisora realizaron una marcha pública para demandar al Gobierno del presidente, Manuel Zelaya, el esclarecimiento del crimen de Salgado.