«Fue una decisión tomada desde hace varias semanas. Se trata de un contrato por medio del cual se da en usufructo un área de 35,000 metros cuadrados del puerto a la empresa TCB, para que administre la operación», dijo un portavoz de la EPQ.
El contrato, que según medios locales guatemaltecos fue suscrito hace tres semanas, otorga a TCB «en usufructo» un área de 35,000 metros cuadrados, por un período de 25 años «prorrogables».
A cambio, la empresa española pagará a la EPQ un millón de dólares anuales fijos por detentar el usufructo, y cuatro dólares por cada contenedor que reciba en el puerto.
«Queremos hacer más eficiente el movimiento de carga de todos los usuarios, para que toda Guatemala sea más competitiva, dijo al local diario Prensa Libre Allan Marroquín, interventor de la EPQ.
El funcionario negó que con la concesión del usufructo a la empresa barcelonesa el Estado esté «privatizando» las operaciones del Puerto Quetzal, como lo denunció días atrás el bloque de diputados del opositor partido Libertad Democrática Renovada (Líder).
«No existe privatización, concesión ni plan de despidos. Es un procedimiento normal de la Portuaria», aseguró.
TCB, agregó Marroquín, fue seleccionada de entre cinco empresas internacionales que presentaron interés de administrar el movimiento de los contenedores en puerto Quetzal.
En 2011, en ese puerto, ubicado en el Pacífico de Guatemala, según cifras oficiales, atracaron 1,289 buques, que movilizaron 8,380 toneladas métricas de carga.
Fundada en 1972, con sede central de Barcelona, TCB es uno de los principales operadores de tráfico marítimo del sur de Europa.