Tegucigalpa – El presidente hondureño, Porfirio Lobo, ha debido asumir el liderazgo ante problemas latentes en Educación, Seguridad, economía doméstica y finanzas. Antes de su último año, el gobernante parece estar solitario.
De tal suerte que en los últimos días el presidente Lobo ha tenido que asumir directamente tareas que debieran ser resueltas por sus colaboradores, pero que al final llegan hasta el palacio presidencial. Temas como educación, seguridad y precios de la canasta básica además de aclaraciones sobre pago de compromisos laborales a burócratas han desfilado en la atención de la agenda del dignatario hondureño.
Lobo anuncia más fuerzas especiales en Olancho
Pese a que su jefe policial, Juan Carlos Bonilla, no ha descansado en sus tareas, el gobierno hondureño se encuentra atribulado por la violencia que reportan las masacres en diversas regiones del país y especialmente en zonas, como el departamento de Olancho, donde el crimen organizado campea y hace cumplir su ley, pese a los esfuerzos de las fuerzas del orden.
El último hecho violento en las pampas olanchanas dejó once muertes violentas, la mayoría jóvenes con edades que oscilaban entre los 18 y 25 años.
Ante esos acontecimientos violentos, el mandatario Lobo advirtió que “se está luchando, seguiremos luchando, lamentamos todo lo que ha sucedido, pero les digo que la lucha puede ser dura, puede ser difícil, pero el bien va a triunfar sobre el mal, no tengan la menor duda”.
Asimismo, anunció que se podrían realizar operativos de fuerzas especiales, en el departamento de Olancho, al tiempo que afirmó: “recuerden que yo soy de Olancho, yo vivo ahí, y lamento profundamente la muerte del ingeniero Rigoberto Méndez, nos interesa controlar esa situación y la vamos a controlar”.
Presidente se sube a los buses

Desde el pasado 28 de septiembre unos 200 elementos del ejército hondureño brindan seguridad en 20 rutas del transporte urbano en Tegucigalpa, capital de Honduras.
Lobo vende productos en tiendas móviles de Banasupro

En un acto simbólico, el pasado fin de semana, el mandatario visitó distintas colonias de la capital para supervisar el desarrollo de las ferias móviles que realiza la Suplidora Nacional de Productos Básicos (Banasupro) en unos 60 puntos de la ciudad con el objetivo de beneficiar a los consumidores de menor poder adquisitivo.
Lobo se apostó en un camión de Banasupro para ofrecer productos de la canasta básica a menor precio.
El magisterio en la agenda directa del Presidente
Otro tema que se ha escapado del escritorio del ministro, Marlon Escoto, para pasar al altar Q del mandatario, es la creciente y permanente crisis educativa.

El decreto indica que la violación a esa disposición se penará bajo la modalidad de responsabilidad penal, civil y administrativa, según corresponda.
Al día siguiente de aprobada la normativa, los maestros retaron al gobierno ya que la dirigencia magisterial dejó encerrados a empleados de la secretaría de Educación en Comayagüela, al poner candados al portón principal en dichas instalaciones.
Asimismo, han anunciado movilizaciones para el próximo miércoles a partir de las 4:00 de la tarde en las principales vías de la capital hondureña.
El mandatario sale al paso para aclarar que no amargará la navidad a burócratas

Borjas dijo que los dos mil millones de lempiras que se requieren para pagar aguinaldos no se encuentran presupuestados. Su declaración causó ruido y agravó las preocupaciones de los burócratas.
Frente a las alarmas desatadas por las declaraciones de Borjas, el propio presidente salió al paso para afirmar que el pago a los empleados públicos no se interrumpirá.
“Cualquier cosa se puede sacrificar menos la navidad de los empleados. Hay dinero en Finanzas, todos los días hay ingreso de recursos, se les dará prioridad a los salarios de la gente que trabaja”, manifestó.
Las finanzas públicas no son nada halagadoras. En los últimos cuatro años, la tasa de crecimiento de la deuda interna ha sido del 44 por ciento y 10 por ciento la externa, lo que representa 2,511 millones de dólares en compromisos internos y 3,610 en endeudamiento externo, mientras las negociaciones para lograr un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), son inciertas.