Tegucigalpa – Un grupo de 13 jueces y magistrados de lo penal con competencia nacional en materia de corrupción fueron presentados este miércoles con el aval de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (MACCIH), en presencia del presidente de la Corte Suprema de Justicia, Rolando Argueta, y del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro.
– El secretario de OEA reconoció que el proceso de selección de jueces fue impulsado en forma transparente.
Los profesionales que ocuparán los cargos de Magistrados de Corte de Apelaciones son: Rosaminda Velásquez Centeno, Edin Yobany De La O Ramos, Jocelyn Marie Donaire Fernández, Rubén Antonio Mendoza, Díaz, Telma Consuelo Burgos Landa, Karla María Martínez.
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— Proceso Digital (@ProcesoDigital) 18 de enero de 2017
En tanto, para los cargos de Jueces de Tribunal de Sentencia: Ingrid Ebelinda Monzón López, Fernando Gabriel Morazán Aguilera y Karla María Arita Mendoza.
Comienza nueva etapa en Honduras
El secretario de OEA, Luis Almagro, al hacer uso de la palabra manifestó que el nombramiento de los jueces anticorrupción reconfirma el compromiso de Honduras para enfrentar este flagelo.
Continuó que la nueva Jurisdicción Nacional procesará los casos de corrupción de mayor impacto en Honduras, por lo que auguró que comienza una nueva etapa en el país.
“Con la creación de esta jurisdicción penal, esperamos que, ahora sí, los resultados para investigar y sancionar a los corruptos puedan hablar por sí mismos. Esta iniciativa debe suponer el comienzo del fin de la impunidad”, dijo.
Reconoció que el combate contra la impunidad requiere que las propuestas normativas dirigidas a combatirla vayan acompañadas o complementadas por recomendaciones sobre el diseño e implementación de una política criminal contra la impunidad.
Almagro citó que la corrupción afecta sobre todo a los más pobres, a los más débiles, a quienes dependen del Estado para la provisión de servicios básicos. La corrupción no solo roba dinero; roba derechos, pues la sustracción de recursos públicos termina generando desatención e indiferencia; termina generando incluso la muerte, pues la corrupción también mata al quitarle a los más pobres recursos indispensables para la salud, educación, vivienda y seguridad.
Mencionó que en pocos meses se creó la jurisdicción especial nacional anticorrupción a pedido de la MACCIH y “hoy asistimos a la presentación de los candidatos finales a jueces y magistrados especializados, producto de una ardua selección”.
Refirió que no es la primera experiencia de éxito en la región, pues por ejemplo Perú cuenta con una jurisdicción especial en dicho sentido. Otros países, como Guatemala y Colombia, tienen jurisdicciones que tratan un reducido ámbito de delitos, entre ellos delitos propios de corrupción.
Puntualizó que “reitero nuestro compromiso de apoyar la consolidación de un sistema especial de justicia independiente, donde se judicialicen casos de corrupción que involucren redes de corrupción para que se identifique y sancione a los responsables”.
Medidas apremiantes contra corrupción
De su lado, el presidente de la CSJ, Rolando Argueta, agradeció el acompañamiento de la OEA-MACCIH en este proceso de selección de jueces y magistrados anticorrupción.
Argueta reconoció que nunca había sido tan apremiante en Honduras “acciones que disminuyan la corrupción e impunidad”.
Afirmó que los nuevos jueces y magistrados anticorrupción fueron seleccionados mediante un riguroso protocolo.
Destacó la labor de mil 967 facilitadores judiciales -493 mujeres y 1,474 hombres-, quienes realizan el voluntariado en 12 de los 18 departamentos y 199 de los 298 municipios del país.
