– “Quiere hablar o quiere trabajar doctor?” cuestionó el Presidente al titular de Salud
El Consejo de ministros, reunido este martes, volvió a conocer el decreto para rendir cuentas en la compra de medicinas, un hecho que está teñido por actos de corrupción tal y como ha sido reconocido oficialmente.
Aparte de la compra, también el canal de distribución es otro embudo cuyo cuello evita la fluidez y hasta paraliza el sistema.
Diferencias entre colores de los frascos
“Seguro que si revisamos el precio al que se compró el medicamento en la licitación y lo comparamos con el precio al que se puede comprar, seguro habrá una enorme diferencia” , dijo el mandatario evidenciando su visión, más allá de las dudas, sobre la podredumbre que rodea la compra de medicinas en el sistema sanitario público hondureño.
Así, el gobernante rechazó la propuesta de decreto en la que las compras directas de medicamentos tengan como referente las últimas dos licitaciones.
“Solo les digo que me llama mucho a la inquietud” reafirmó, al ejemplificar que en la licitación “se especifica la compra de tantos frascos de tal cosa, color blanco, en vez de rosado…. hay mecanismos más transparentes”, argulló, a la vez que puso de modelo lo que está pasando en el Hospital Escuela, cuya administración se ha puesto en manos de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
“Siento que en esto debe de haber elasticidad y que se revisen los precios de las licitaciones”, dijo Lobo para agregar, “yo no daría por certificado que los valores a que se compraron (los medicamentos) fueron los mejores valores”.
El presidente pujó por ampliar la comisión que supervisa la compra de medicamentos y abrirla a mayor participación de la sociedad civil. Igualmente se pronunció porque la misma sea la instancia donde se revise cada compra desde su origen.
“Artículo de la discordia”
La ministra de Turismo, Nelly Jerez, propuso la creación de una precalificación de las empresas oferentes, a la vez que señaló que justamente el tema de la base de compras, usando licitaciones anteriores como referentes, representa una especie de “artículo de la discordia”.
La ministra pidió quedar fuera de la aprobación de la iniciativa de decreto en el caso de no ser modificada.
“No tenemos una referencia que esos son los mejores precios. Hay un comité al que se le entrega todo ya hecho” dijo Jerez, quien además es una profesional del área de la salud.
El decreto que se ha dilatado en cuanto a su aprobación, debido a las inconsistencias y a la oscuridad de sus propuestas, busca regular el 30 por ciento de las compras estatales.
La ministra jerez también denunció que los actos inapropiados no solo se dan en las compras de medicinas sino también en su entrega a los centros sanitarios.
“No solo es esto, sino el llevar el medicamento a los lugares. Creo que debe buscarse una manera expedita de entrega. Se compran y no llega al lugar el medicamento que se ha comprado…” puntualizó la funcionaria.
¿Trabajar o hablar?
Sin respuestas claras, el ministro de Salud, Arturo Bendaña, pidió la palabra una vez que el presidente anunció que la firma del decreto se posponía para un próximo consejo ministerial.
“Quiere hablar o quiere trabajar doctor? hable, yo no tengo ningún problema” le dijo el presidente. El funcionario habló y su discurso resonó en un salón que se llenó de vergüenza ajena.
