Tegucigalpa – El Sistema de Naciones Unidas en Honduras instó este jueves a las autoridades de seguridad a que investiguen los asesinatos de una mujer trans defensora de los derechos humanos y un líder campesino.
Mediante un comunicado, señaló que la protección de la vida de las personas defensoras de derechos humanos y su trabajo es fundamental para el estado de derecho y el goce de la población hondureña.
Pidió la investigación de la muerte de la defensora Soraya Álvarez de la organización “Arcoiris”, ocurrida en la ciudad de Tegucigalpa.
Asimismo, exigió la investigación del crimen del líder campesino José David Fortín en el Valle del Aguán, quien era el secretario de la cooperativa campesina Tarros.
Estos hechos suceden una semana después de los atentados contra la defensora de derechos humanos garífuna, y coordinadora general de la Organización Fraternal Negra de Honduras (Ofraneh), Miriam Miranda.
También, recordó la agresión contra el defensor de derechos humanos y de la tierra, el territorio y el medio ambiente, José Ramiro Lara Zavala, integrante de ASONOG.
En el caso de Miriam Miranda, lamentó que las agresiones sucedieran a pesar de que ella es beneficiaria de medidas cautelares emitidas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en 2011,
La ONU consideró preocupante y reafirmó la necesidad de fortalecer los mecanismos de protección y esfuerzos colaborativos para ello. AG
