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Normalidad en mitin central 1 de mayo en Alemania, incidentes en otros puntos

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Berlín – La Confederación de Sindicatos Alemanes (DGB) advirtió hoy en contra de la xenofobia y la ultraderecha en su manifestación central con motivo del 1 de mayo en la ciudad de Stuttgart, en el sur de Alemania, que transcurrió de forma pacifica, mientras que en otro puntos del país se registraron incidentes.

«Lo que exigen los populistas de derechas no tiene nada, pero nada que ver, con la cohesión social, nada con la justicia social, nada con globalización justa y menos aún con solidaridad», dijo el presidente de la DGB, Reiner Hoffmann.

Acusó a la formación populista de derechas Alternativa para Alemania (AfD) de practicar una política orientada a desmantelar la protección social y de intentar dividir aún más a la sociedad.

Además, criticó a la AfD -que paralelamente aprobaba hoy en Stuttart en su congreso federal una moción programática según la cual el islam «no forma parte» de ese país- por fomentar una campaña de difamación contra los refugiados.

Más de 6.000 personas, según los organizadores -1.600 según la Policía, acudieron al mitin de la DGB en Stuttgart, mientras que alrededor de 390.000 personas participaron en los más de 500 actos convocados por el sindicato en todo el país bajo el lema «Tiempo para más solidaridad».

En tanto, en Plauen, en el estado federado de Sajonia (este) varias personas resultaron heridas como consecuencia de enfrentamientos violentos entre manifestantes tanto ultraderechistas como izquierdistas y las fuerzas de seguridad, que obligaron a la Policía a utilizar cañones de agua y gases lacrimógenos.

Previamente, unos mil manifestantes de izquierdas habían salido a la calle para obstaculizar una marcha en la que participaban unos 500 activistas de ultraderecha.

Paralelamente, otras 400 personas se congregaron en una contramanifestación para protestar contra los ultraderechistas.

En tanto, en Zwickau, también en Sajonia, un grupo de ultraderechistas interrumpió el discurso del ministro de Justicia, Heiko Maas, con pitos y abucheos, lo que obligó a la Policía a reforzar la seguridad en torno a la tribuna.

En Bochum, en el oeste del país, dos agentes resultaron heridos por contramanifestantes que se enfrentaron a los asistentes a un mitin convocado por el ultraderechista Partido Nacional Democrático (NPD).

Alrededor de 2.400 contramanifestantes trataron de boicotear el mitin ultraderechista, que congregó a unos 180 participantes, y lanzaron piedras, botellas y bengalas contra los agentes, señaló la Policía.

Las fuerzas de seguridad se vieron obligadas a emplear gas pimienta y contaban también con cañones de agua.

En Berlín, centenares de contramanifestantes salieron a la calle para frenar las marchas organizadas por ultraderechistas en los distritos orientales de Weißensee y Hohenschönhausen.

En el primero, un político del NPD fue detenido temporalmente por tratar de agredir a un agente, mientras que en el segundo un contramanifestante hirió a un policía.

En tanto, unos 30.000 berlineses disfrutaron de la fiesta popular «Myfest» en el multicultural distrito de Kreuzberg, donde no se registraron incidentes y reinó un ambiente festivo, señalaron los participantes.

En este mismo barrio tiene lugar esta tarde la tradicional «manifestación revolucionaria del 1 de mayo», donde en años anteriores se registraron disturbios y donde para hoy alrededor de 20.000 activistas de izquierda tiene previsto marchar por sus calles.

Para garantizar la seguridad en Berlín en este primero de mayo, la Policía ha desplegado a alrededor de 6.500 agentes.

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