Tegucigalpa – Autoridades del Hospital Mario Catarino Rivas, revelaron este lunes que 13 de las 16 personas fallecidas a causa del COVID-19, en el hospital móvil de San Pedro Sula (SPS), no estaban inmunizadas contra el mortal padecimiento.
Las muertes corresponden a las últimas 72 horas, confirmó Armando Ramírez, integrante de la Comisión Interventora del centro asistencial sampedrano, quien añadió que “la situación es muy preocupante”.
Agregó que muchas personas se están auto medicando y eso no permite que haya una atención oportuna de la enfermedad, “están utilizando el esquema de medicamento que le dieron a un vecino o a un familiar”.
Señaló que la evolución de la enfermedad en ese tipo de personas es negativa, porque no hay supervisión médica en la aplicación de las medicinas, eso es lo que está haciendo más complicada la situación.
Ramírez reveló que hay personal médico que se ha contagiado, pero sin presentar dificultades mayores de salud, porque ya tienen su esquema completo de vacunación “es un ejemplo para que todos se vacunen”.
En ese sentido, dijo que existe un relajamiento que es muy negativo para los esfuerzos en contener la pandemia, por lo que insistió que las personas no deben tener miedo porque la vacuna es 100 % segura.
“El fin de semana murieron 16, donde 13 de ellos no estaban vacunados y tres de ellos apenas lograron recibir una de las dos dosis del inmunizante”, concluyó diciendo el interventor del Mario Catarino Rivas. JP
