Tegucigalpa – Estados Unidos ha notificado a las autoridades hondureñas que no habrán más ampliaciones al Programa de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés), se informó hoy.
El embajador de Honduras en Washington, Roberto Flores Bermúdez, dijo a Radio América que la decisión se la ha hecho saber el director de Migración de los Estados Unidos, Emilio González, a quien calificó como “un buen amigo, que ha ayudado muchísimo” con la actual ampliación del TPS.
“Si, en efecto, en las conversaciones que hemos tenido se nos ha indicado que esta es la última vez que se está haciendo esta extensión del TPS”, declaró el diplomático, quien consideró como “una circunstancia excepcional que se nos haya concedido la séptima (extensión) y no se visualiza de que vayan a haber más”, explicó.
Dijo que la decisión estadounidense mantiene preocupadas a las autoridades hondureñas, las que desde ya buscan opciones para proteger a por lo menos 70.000 hondureños que gozan de este privilegio desde su aprobación en 1999.
Explicó que una de las opciones que se estudian, –aunque no la mejor- “pero que es casi, casi seguro que se puede dar, en el sentido de que se aplique el concepto de lo que es la orden diferida de salida de los Estados Unidos”.
“Es una situación de menor ventaja que el TPS porque no tiene un plazo y depende de una decisión (…) que es menos fundamentada en cuanto a derechos de lo que es el TPS”, indicó.
“Pero hay otras opciones que se están considerando, lógicamente aspiraríamos a una solución permanente como aquella que hemos buscado en una nueva ley de política migratoria norteamericana”, añadió.
Flores Bermúdez dijo que “lo que hay es una tarea por delante para poder encontrar un espacio para que nuestros compatriotas puedan permanecer en Estados Unidos y que no sean obligados a un regreso masivo que podría provocar condiciones adversas”.
La última ampliación del TPS vencerá el 5 de enero de 2009.
El anuncio se hizo en momentos en los cuales diversos sectores de la sociedad hondureña consideran que las relaciones entre Estados Unidos y Honduras pasan por un momento difícil, tras el aparente acercamiento del presidente Manuel Zelaya a los presidentes de Nicaragua, Daniel Ortega, y de Venezuela, Hugo Chávez, ambos de tendencia izquierdista y fieros críticos de las políticas estadounidenses en el continente americano.
Zelaya viajó la semana anterior a Nicaragua para celebrar junto a Ortega y Chávez el 28 aniversario de la revolución sandinista.
La visita ha sido ampliamente cuestionada por diversos sectores políticos, a los que el presidente Zelaya ha definido como “cabezas calientes” que quieren que Honduras “esté en conflicto con El Salvador y Nicaragua”.
Flores Bermúdez descartó que las decisiones de Estados Unidos estén ligadas a este hecho y aseguró que las mismas “obedecen a una agenda doméstica, a un problema interno aquí y que está vinculado inclusive con posiciones políticas ya que estamos entrando en esta etapa de debates públicos sobre los temas que manejan los dos partidos tradicionales norteamericanos”.
”Es una agenda doméstica y no está relacionada con visitas o con movimientos que se puedan hacer”, aseveró.
Actualmente, el canciller hondureño, Milton Jiménez, se encuentra en los Estados Unidos realizando una gira por varios estados de aquel país para pedir a los beneficiarios del programa que procedan a su reinscripción en el TPS.
Según cifras extraoficiales, más de 60.000 hondureños se han reinscrito en el TPS, a una semana que concluya el período establecido para tal fin.