Managua – Nicaragua ultima hoy los preparativos para que el presidente Daniel Ortega sea investido mañana para un nuevo mandato de cinco años, el segundo consecutivo, en medio de protestas de la oposición y con la presencia de ocho jefes de Estado y del príncipe Felipe, heredero de la Corona española.
Ortega asumirá su tercer mandato, el segundo consecutivo, en presencia de unas 8.000 personas, entre ellas mandatarios aliados como Hugo Chávez (Venezuela), Mahmud Ahmadineyad (Irán), en la Plaza de la Revolución, en el antiguo centro de Managua y donde los sandinistas celebraron el 19 de julio de 1979 el derrocamiento de la dinastía de los Somoza.
Ortega, de 66 años, asumirá un nuevo mandato en Nicaragua luego de ser reelegido con una polémica candidatura en las elecciones del 6 de noviembre pasado, cuestionadas por observadores internacionales y locales y desconocidas por la oposición.
Pese a que la Constitución prohibía su candidatura, Ortega fue reelegido con el 62,42 % de los votos en esos comicios y su partido, el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), obtuvo 62 de los 90 escaños en disputa, cantidad suficiente para reformar la Carta Magna.
La primera dama y portavoz gubernamental, Rosario Murillo, afirmó que Ortega está «listo» para empezar este martes un nuevo mandato de cinco años con el objetivo de dirigir uno de los «mejores Gobiernos» en la historia del país.
«Nos preparamos al detalle para la juramentación (…) para que sea una de las mejores (Administraciones) de nuestra historia democrática», dijo a medios oficiales Murillo, coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía.
Hasta ahora han confirmado su participación en los actos de investidura de Ortega los presidentes Álvaro Colom (Guatemala), Mauricio Funes (El Salvador), Porfirio Lobo (Honduras) y Ricardo Martinelli (Panamá).
También los presidentes Chávez, Ahmadineyad -quien realiza una gira por Latinoamérica-, Desiré Delano Bouterse (Surinam) y Michel Martelly (Haití), según Murillo.
Otto Pérez Molina, presidente electo de Guatemala y quien tomará posesión del cargo el sábado, también asistirá a los actos de investidura de Ortega.
El Gobierno nicaragüense espera, además, la llegada mañana del príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, heredero de la Corona española, con quien Ortega mantendrá una «reunión de trabajo», según la portavoz oficial.
La funcionaria dijo que ya se encuentran en Managua los primeros ministros de Aruba, Michael Godfried Eman y de Curacao, Guerrit Francisco Schotte y el ministro de Exteriores de Taiwán, Timothy Yang.
Al acto oficial que se celebrará en Managua también asistirán los vicepresidentes Álvaro García (Bolivia), Ramiro Valdéz (Cuba), Marisol Espinoza Cruz (Perú) y Rafael Albuquerque (República Dominicana), entre otras delegaciones, para totalizar 79 países.
Estados Unidos, que no tiene embajador en Nicaragua, no ha dicho si enviará o no una delegación, mientras su vecino Costa Rica, con quien tiene problemas limítrofes, envió a un funcionario de Cancillería.
Ortega jurará al cargo en medio de protestas de grupos opositores que consideran inconstitucional y fraudulenta su investidura como presidente de la República.
Por esa razón, en la actividad de mañana no participarán los 26 legisladores de la opositora alianza Partido Liberal Independiente (PLI), la segunda más votada en los comicios pasados.
La nueva Asamblea Nacional se constituyó hoy para un periodo de cinco años, en la que los sandinistas y sus aliados cuentan con una abrumadora mayoría y ocuparán todos los cargos directivos.
El grupo que respalda a Ortega tiene en total 63 de los 91 diputados, incluido al vicepresidente saliente, el liberal Jaime Morales Carazo, quien asume un escaño de acuerdo con la ley.
En tanto, un grupo de organizaciones civiles opositoras al Gobierno se manifestaron hoy pacíficamente contra los legisladores al inicio de su mandato, cerca de la sede de la Asamblea Nacional.
Ortega, de 66 años, asumirá un nuevo mandato en Nicaragua luego de ser reelegido con una polémica candidatura en las elecciones del 6 de noviembre pasado, cuestionadas por observadores internacionales y locales y desconocidas por la oposición.
Pese a que la Constitución prohibía su candidatura, Ortega fue reelegido con el 62,42 % de los votos en esos comicios y su partido, el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), obtuvo 62 de los 90 escaños en disputa, cantidad suficiente para reformar la Carta Magna.
La primera dama y portavoz gubernamental, Rosario Murillo, afirmó que Ortega está «listo» para empezar este martes un nuevo mandato de cinco años con el objetivo de dirigir uno de los «mejores Gobiernos» en la historia del país.
«Nos preparamos al detalle para la juramentación (…) para que sea una de las mejores (Administraciones) de nuestra historia democrática», dijo a medios oficiales Murillo, coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía.
Hasta ahora han confirmado su participación en los actos de investidura de Ortega los presidentes Álvaro Colom (Guatemala), Mauricio Funes (El Salvador), Porfirio Lobo (Honduras) y Ricardo Martinelli (Panamá).
También los presidentes Chávez, Ahmadineyad -quien realiza una gira por Latinoamérica-, Desiré Delano Bouterse (Surinam) y Michel Martelly (Haití), según Murillo.
Otto Pérez Molina, presidente electo de Guatemala y quien tomará posesión del cargo el sábado, también asistirá a los actos de investidura de Ortega.
El Gobierno nicaragüense espera, además, la llegada mañana del príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, heredero de la Corona española, con quien Ortega mantendrá una «reunión de trabajo», según la portavoz oficial.
La funcionaria dijo que ya se encuentran en Managua los primeros ministros de Aruba, Michael Godfried Eman y de Curacao, Guerrit Francisco Schotte y el ministro de Exteriores de Taiwán, Timothy Yang.
Al acto oficial que se celebrará en Managua también asistirán los vicepresidentes Álvaro García (Bolivia), Ramiro Valdéz (Cuba), Marisol Espinoza Cruz (Perú) y Rafael Albuquerque (República Dominicana), entre otras delegaciones, para totalizar 79 países.
Estados Unidos, que no tiene embajador en Nicaragua, no ha dicho si enviará o no una delegación, mientras su vecino Costa Rica, con quien tiene problemas limítrofes, envió a un funcionario de Cancillería.
Ortega jurará al cargo en medio de protestas de grupos opositores que consideran inconstitucional y fraudulenta su investidura como presidente de la República.
Por esa razón, en la actividad de mañana no participarán los 26 legisladores de la opositora alianza Partido Liberal Independiente (PLI), la segunda más votada en los comicios pasados.
La nueva Asamblea Nacional se constituyó hoy para un periodo de cinco años, en la que los sandinistas y sus aliados cuentan con una abrumadora mayoría y ocuparán todos los cargos directivos.
El grupo que respalda a Ortega tiene en total 63 de los 91 diputados, incluido al vicepresidente saliente, el liberal Jaime Morales Carazo, quien asume un escaño de acuerdo con la ley.
En tanto, un grupo de organizaciones civiles opositoras al Gobierno se manifestaron hoy pacíficamente contra los legisladores al inicio de su mandato, cerca de la sede de la Asamblea Nacional.
