Tegucigalpa – El arzobispo de Tegucigalpa, monseñor Vicente Nácher, pidió en la homilía por el 447 aniversario de Tegucigalpa en honor a San Miguel Arcángel, poner al patrono, guardián y protector de la capital como ejemplo a admirar y señaló que “una sociedad que pusiera a malos ciudadanos como ejemplo a admirar, sería una sociedad enferma y desquiciada”.
Para el guía espiritual de la feligresía católica de Honduras, una sociedad donde abundan las personas falsas o sin escrúpulos, como resultado se da una sociedad que sufre.
Durante la misa solemne, realizada en la Catedral de San Miguel Arcángel, en el centro histórico de la ciudad, el guía espiritual de los hondureños dijo que una sociedad debe seguir buenos ejemplo porque si se pusiera a malos ciudadanos como ejemplo a admirar, “sería una sociedad enferma y desquiciada. Sería una sociedad impregnada de maldad y perversidad, lo contrario a la voluntad divina”.
En su mensaje el arzobispo de la capital estimó que tal vez estamos tan acostumbrados a otras cosas que casi nos parece imposible encontrar hombres y mujeres auténticos, sinceros, consecuentes y coherentes en su vida, como Natanael, a quien hizo referencia el evangelio del día. “Pero estas personas existen, y están cerca», aseguró.
Monseñor Nácher destacó que el arcángel San Miguel, “el que derrota y expulsa a satanás, es para nosotros una inspiración y a la vez un compañero de combate de la fe”.
“No estamos particularmente en un mal momento histórico, sino que el mal es una realidad, que siempre trata de corromper nuestra historia”, dijo al señalar que esto pasa muy a pesar de los fatalistas.

Reconocimientos
Nácher reconoció el aporte de las Pequeña Hermanas de la Sagrada Familia y de don Jorge Mahomar quienes han destacado en la arquidiócesis por su testimonio y quienes son como nuevo Natanael, personas sin tacha, coherentes y dispuestas a seguir a Jesús.
“Este año reconocemos a las pequeñas hermanas de la Sagrada Familia, fundadas por Santa Leonia y que durante más de 60 años han estado entre nosotros de manera discreta pero eficaz”, detalló.
Sobre don Jorge Mahomar dijo que es un capitalino ejemplar muy conocido por su labor social y altruista que por décadas y todavía hoy, está cerca de los más pobres y abandonados. “Un ejemplo de profundad calidad cristiana, al que apreciamos y admiramos, sinceramente”, describió al referirse a los galardonado al premio de la Orden San Miguel Arcángel.
El arzobispo de Tegucigalpa abogó por que también los capitalinos, con el auxilio de San Miguel Arcángel, “podamos ser buenos ciudadanos y buenos discípulos de Jesús”, concluyó. VC

