San Pedro Sula – Un grupo de menores infractores que permanecen recluidos en el centro de rehabilitación “El Carmen” que se ubica en San Pedro Sula, norte de Honduras, denunciaron ser víctimas de agresiones y lesiones en distintas partes de sus cuerpos.
– Autoridades del Dinaf aún no ofrecen explicaciones sobre lo que ocurrió con los menores.
– A un menor le habrían arrancado un dedo y posteriormente lo obligaron a comérselo, extremo que está siendo investigado por las autoridades.
Las agresiones y graves lesiones que presentan los menores infractores no han sido precisadas si son producto de enfrentamientos entre grupos rivales o en su defecto con las autoridades que brindan seguridad en esos recintos de reclusión.
Elementos de Medicina Forense en el norte del país realizan las evaluaciones de los menores para determinar la seriedad de la denuncia.
Se constató que uno de los jóvenes sufrió mutilación de dedos en una de sus manos, en tanto otros presentaban golpes en distintas partes del cuerpo.
Proceso Digital quiso conocer la versión de las máximas autoridades de la Dirección de la Niñez, Adolescencia y Familia (Dinaf), pero no atendieron la comunicación.
El Dinaf es el ente que tiene la tutela de los centros de internamiento en todo el país.
Los centros de rehabilitación de menores, al igual que las cárceles de adultos, siguen siendo de alto riesgo tanto para los internos como para quienes ofrecen seguridad.
Fugas, reyertas, motines, asesinatos e incluso el hallazgo de fosas clandestinas son parte de las historias que constantemente se narran desde los centros de internamiento.
