Tegucigalpa – En Honduras 14 mil 800 muestras de sangre, un 88 por ciento tomadas en 2012, no han sido sometidas a análisis para comprobar la existencia o no del mal de chagas, debido a la falta de reactivos y a la carencia de insumos.
– El mal de chagas o la enfermedad de la pobreza, como se le conoce internacionalmente, no cuenta en Honduras con una estrategia efectiva para su combate.
La información contrasta con las denuncias de manejos amañados en la adquisición de medicamentos, entre una serie de evidencias de corrupción en el sistema.
De las 50 mil muestras que fueron enviadas para su análisis en 2012, aún quedan por analizarse 13 mil confiaron a Proceso Digital expertos sanitarios del sistema público.
En lo que va de 2013, las muestras recibidas en el Programa Nacional del Dengue suman mil 800, las cuales duermen en sueño de los justos debido a que para ser sometidas al análisis respectivo deberán ser evacuadas, por orden de llegada, las que se recibieron el año anterior.
Fuentes sanitarias dijeron que recién se han recibido reactivos y que esperan sacar la mora sanitaria en el mal de chagas en el transcurso del mes entrante.
El mal afecta especialmente a comunidades rurales de Honduras y de otras regiones en América Latina. Considerada por la Organización Mundial de la Salud como una de las enfermedades más desatendidas en el planeta y como una enfermedad de la pobreza por la Organización Panamericana de la Salud, su persistencia en tierras hondureñas incide en los más excluidos.
La repetida historia de Juan Flores
Su nombre era Juan Flores (68), labriego, residía en la comunidad de La Ermita, Talanga, Francisco Morazán, presa de cardiomegalia, paciente asiduo del centro de salud de la localidad. Su corazón estaba afectado por el mal de chagas.
Norma Carranza, su esposa, compartió con Proceso Digital, parte de la historia que aún se repite en cientos de hogares hondureños donde la chinche picuda hace estragos entre la vulnerable población.
A finales del Siglo XX cuando el labriego fue víctima de la picadura de la chinche. Pasó más una década para que sucumbiera. Su corazón ya no resistió. Hace escasas semanas Juan falleció.
Durante su padecimiento Juan Flores fue atendido en varios centros asistenciales, incluso estuvo interno, su salud no pudo ser recuperada, debido a los daños que provocó en su organismo el parasito que deja en la sangre la chinche.
Expertos consultados por Proceso Digital dijeron que la enfermedad de chagas muestra sus primeros síntomas entre 10 y 25 años después de la picadura de la chinche.
Estos síntomas se manifiestan con agrandamiento de corazón, del colon, del hígado, del bazo, cardiomioptía y afectaciones de otros órganos, los cuales son irreversibles.
Lo anterior, genera que las personas, no mueran con un diagnóstico del mal de chagas específicamente, sino por las descompensaciones que forman los daños cardíacos pronunciados y otras patologías asociadas, según los estudiados en la materia.
El parásito que la chinche picuda deja en la sangre a sus víctimas es lo que genera el mal de chagas.
En Honduras existe el denominado Programa Nacional de Chagas, creado para contener el mal en 13 de los 18 departamentos del país. Su acción es inefectiva.
Todavía no se identifican casos del año anterior
Se estima que anualmente en Honduras se aplican pruebas a unas 50 mil muestras de sangre de personas sin sintomatología, para identificar la prevalencia de casos de chagas.
Las búsquedas mediante muestreos son aplicadas en población de seis meses a 15 años y de la tercera edad.
Fuentes sanitarias especializadas que trabajan en el sistema público, revelaron a Proceso Digital que aún no se han concluido los análisis y la entrega de los resultados de las muestras tomadas en 2012.
De acuerdo a los datos que maneja el programa estatal, de un número de 50 mil muestras tomadas en 2010, resultaron positivas 515; en el 2011 se tomó la misma cantidad de muestras y de ellas 330 arrojaron resultados positivos. En 2012 han resultado positivos 121 casos pero aún faltan más de 13 mil muestras que no han sido analizadas.
Asimismo, se han recibido mil 800 muestras en lo que va de 2013.
Uno de los miembros del programa, quien prefirió el anonimato debido a la aplicación de medidas coercitivas contra los empleados que brindan información a la prensa, confió que las causas que han venido a interrumpir el proceso de análisis de las muestras es la carencia de insumos y reactivos.
Debido a que las muestras son analizadas por orden de llegada, deben ser evacuadas las de 2012 para luego iniciar con las del presente año.
Es hasta que ya se cuenta con el resultado que se busca al paciente que reflejó, en este caso, por lo menos un año después.
Recién el programa ha recibido reactivos, por lo que en julio, esperan cumplir con los análisis de las muertas tomadas en 2012.
Los casos de esta enfermedad se continúan registrando en la población, hace unos días, fue confirmada la presencia del mal de chagas en la Fraternidad, comunidad fronteriza con Nicaragua, zona sur hondureña, con 10 casos.
Inactividad en el combate
La falta de fondos por parte de la Secretaría de Salud y la debilidad de apoyo de cooperantes, ha generado que diferentes actividades del programa se encuentren paralizadas.
Las acciones de rociamiento de viviendas y la toma de muestras a pacientes se han visto interrumpidas actualmente porque no cuentan con financiamiento; a diferencia de la promoción de la salud, porque solamente toman un megáfono y se brindan charlas de orientación a las personas, dijo la fuente.
Se conoció que en lo que va del año, Salud ha realizado intervenciones por esta enfermedad, sólo en los departamentos de Choluteca y Valle.
Históricamente, lo casos se han registrado en Santa Bárbara, Ocotepeque, Santa Rosa de Copán, Intibucá, La Paz, Lempira, Comayagua, Choluteca, Valle, Francisco Morazán, El Paraíso y Olancho.
Continúa toma de muestras
Los empleados de Salud, cuentan con una serie de inconvenientes para desarrollar las labores de combate y prevención de la enfermedad, como falta de suministros y reactivos, transporte para trasladarse a las zonas amenazadas por la chinche y otras carencias.
Lo anterior no impide que continúen con las intenciones de brindar el servicio a la población. Este viernes, formaron parte de la feria de la salud celebrada en el parque central de Tegucigalpa, la capital. Allí tomaron 230 muestras a personas que llegaron al lugar. Ellos esperan aprovechar que actualmente hay insumos.
Las autoridades sanitarias hondureñas cuentan con un Plan Nacional de Prevención y Control de Chagas 2008-2015 englobado en la Estrategia de Reducción de la Pobreza (ERP) y los Objetivos de Desarrollo del Milenio y para ello se dispone del apoyo de la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) y la Cooperación Canadiense.
¿Qué es el Chagas?
La enfermedad de chagas es un mal crónico producido por dos tipos de este insecto transmisor de la enfermedad, los cuales son el triatoma dimediata y la rhodnios prolixus, este último es el más pequeño y agresivo, también es el menos conocido por la población y por el cual el país fue declarado libre de tal enfermedad en 2011.
Tanto el Triatoma dimidiata como el Rhodnius prolixus, trasmiten el Chagas, pese a que la lucha es permanente el animal puede aparecer en los lugares donde la mayoría de las casas son construidas de bajareque, adobe y madera, considerados como el hábitat de la chinche.
El mal de chagas provoca una inflamación aguda del corazón que lleva a la persona a un estado crónico, dejando de bombear generando asfixia y una variedad de lesiones, que lo hace colapsar.
Igualmente cuando el infectado pasa a la etapa crónica, puede padecer de insuficiencia cardiaca y discapacidad o sufrir la muerte súbita.
