La Asociación Española de Investigación sobre el Cáncer (Aseica) ha pedido hoy al Ministerio de Ciencia e Innovación que prorroguen los contratos temporales del personal investigador para compensar la pérdida de tiempo real causada por la pandemia del coronavirus.
Aseica, que también ha formulado esa solicitud a la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y al Instituto de Salud Carlos III, considera que los contratos deberían extenderse entre ocho y doce meses para compensar la pérdida de tiempo provocada por la crisis de la Covid-19.
Y es que la pandemia ha hecho que miles de investigadores hayan tenido que interrumpir su labor presencial en los centros investigadores, especialmente todos los que se dedican a la investigación experimental como la básica, traslacional y clínica en cáncer, recuerda Aseica en una nota.
«El problema es todavía mayor, porque en muchos casos se ha interrumpido la colección de muestras de experimentos de muy largo plazo que son, por ejemplo, típicos en el ámbito de la oncología» y, además, «las medidas de confinamiento han llevado a sacrificar muchos modelos animales en los animalarios de los centros de investigación que tardarán meses en poderse recuperar otra vez», advierte el presidente de Aseica, Xosé Bustelo.
Todos estos problemas hacen que las investigaciones de estos científicos en formación se vayan a retrasar muy considerablemente, lo que repercutirá en su currículum científico y carrera científica posterior, lamenta la nota.
Pasos en la buena dirección pero insuficientes
No obstante, Aseica reconoce que tanto el Ministerio como la AEI han dado pasos en esta dirección, pero «muy tímidos y, en algunos casos, muy cicateros».
Por un lado, solo reconocen como perjudicados a algunos de los investigadores jóvenes que acaban el contrato este año pero, debido a ciertas «triquiñuelas contables, han dejado fuera de esta media a colectivos tan importantes como los contratados para la formación de doctores (antiguas FPI) dado que su finalización quedaba fuera del periodo de la Covid-19», explica la nota.
Además, tampoco consideran a los investigadores que, pese a ver retrasadas sus investigaciones, no se benefician de esta medida por no finalizar su contrato este año, lamenta la nota.
Aseica cree que deberían prorrogarse los contratos de todas las convocatorias públicas de personal investigador, sea cual sea su fecha de finalización, y propone establecer, o bien, una medida general para todos los afectados o, alternativamente, una media progresiva (6-12 meses) en función de cuando se hubiese comenzado el contrato de formación.
«Sin esa medida, esta crisis tendrá como efecto secundario una pérdida muy significativa en la competitividad de las nuevas generaciones de científicos que la han sufrido», señala Bustelo.
También recomienda poner en marcha medidas similares en los programas de formación análogos financiados por las comunidades autónomas porque la crisis ha demostrado la importancia de la ciencia y la investigación para la salud, y eso exige «contar con un sistema nacional de I+D+i fuerte que pueda hacer frente a todos los retos venideros».
