París – Coincidiendo con el fin de semana del año en el que más compras se hacen, un 34 % de los franceses teme no poder hacer regalos en la Navidad de 2022 debido a la inflación y a la pérdida de poder adquisitivo, según varios sondeos nacionales.
Los franceses sienten «una inquietud fuerte de cara al aumento de precios» para estas Navidades, de acuerdo con una encuesta conjunta de la asociación Dons Solidaires y el Instituto Francés de Opinión Pública (IFOP), y más de la mitad de ellos recortará su presupuesto en comparación al 2021.
Si bien muchos temen no poder ofrecer una buena comida navideña (21 % de la población), la preocupación principal, según este sondeo, radica en poder ofrecer regalos a los hijos, algo que temen especialmente los que tienen niños pequeños (44 %).
Siete de cada diez franceses prevén reducir sus gastos en Año Nuevo, según una encuesta del centro de investigación para el estudio y la observación de las condiciones de vida (Crédoc). Entre las formas de hacerlo, destaca la de claudicar de las vacaciones: tres de cada cuatro optan por no irse.
Aun así, los viajes navideños continuarán para un 25 % de la población, alcanzando cifras anteriores a la pandemia, si bien el 81 % de ellos se quedarán en territorio nacional para evitar el aumento de precios de los billetes de avión.
Sin embargo, para muchos es inevitable recortar en el presupuesto de regalos, por lo que, según el barómetro de consumo Sofinco, se reducirá el número de personas a las que los franceses harán regalos (de media, a cinco personas) y las compras se harán sobre todo durante las rebajas.
De hecho, las ventas de juguetes aumentaron un 31 % durante el Black Friday, tal y como indicaron los analistas del grupo NPD.
Si esto no fuese suficiente, un tercio de los franceses se decantará por comprar juguetes de segunda mano.
Los recortes también afectan al mundo laboral, donde un cuarto de las empresas han anulado sus fiestas de Navidad, según el estudio Pleo. AG
