Tegucigalpa – La expresidenta del Colegio Hondureño de Economistas (CHE), Liliana Castillo, advirtió este martes que una posible aplicación de un impuesto del 5 % a las remesas familiares enviadas desde Estados Unidos, tendría graves repercusiones para la economía de Honduras, especialmente en el ingreso de divisas y en las reservas internacionales del país.
Castillo explicó que, para 2025, se estima que Honduras recibirá alrededor de 10,000 millones de dólares en remesas familiares. No obstante, si se implementa este gravamen en Estados Unidos, el país dejaría de percibir unos 500 millones de dólares.
“Ese 5 % significaría que, en lugar de ingresar los 10,000 millones proyectados, solo ingresarían 9,500 millones. Esto afectaría directamente el nivel de reservas internacionales y, por tanto, la estabilidad económica del país”, afirmó.
Además, la economista advirtió que muchos hondureños podrían buscar mecanismos alternativos e informales para enviar dinero a sus familias, lo que podría generar un nuevo reto para la regulación financiera y la seguridad económica. “Podrían utilizar vías menos seguras o no reguladas, lo cual también representa un riesgo para los receptores y para el sistema financiero nacional”, indicó.
Aunque el impuesto aún no ha sido aprobado, Castillo señaló que la propuesta no es nueva y que ha sido discutida en varias ocasiones en Estados Unidos. “Es una pretensión que lleva años. Lo más probable es que esta vez pueda avanzar, ya que significaría una fuente significativa de recaudación para Estados Unidos, considerando que muchos países del mundo dependen en gran medida de las remesas”, explicó.
Castillo concluyó que este posible cambio en la política fiscal estadounidense debe ser monitoreado de cerca por las autoridades hondureñas, ya que representa una nueva variable de gran peso que podría redefinir las proyecciones económicas del país.
Las remesas representan cerca del 28 % del Producto Interno Bruto (PIB) de Honduras y son un pilar fundamental para millones de hogares que dependen de este ingreso para cubrir necesidades básicas como alimentación, vivienda y educación, de ahí la importancia de dicho renglón. LB