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Leyes y “murallas” antiinmigrantes son violatorias de los derechos humanos

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Tegucigalpa – El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos, Ramón Custodio, dijo que cualquier ley o “muralla” migratoria que criminalice la inmigración es violatoria de los derechos humanos porque suprime sin justificación y en forma irrazonable las libertades y derechos fundamentales de estas personas.
 

Expresó su rechazo a la aprobación de leyes que buscan criminalizar la inmigración indocumentada. “Lo que hacen es propiciar, con ello, movimientos racistas y xenófobos que luego atentan contra la integridad, seguridad y eventualmente contra la vida de miles de hondureños y centroamericanos que diariamente cruzan las fronteras estadounidenses”, precisó.

Según Custodio, la emigración, vista como necesidad humana, debe ser tratada como tal y caracterizarse por la vigencia y absoluto respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales de los inmigrantes, sin importar su condición migratoria.

Cuestionó que los gobiernos de la región han hecho del libre comercio una libertad más importante que la de locomoción y de residencia, es por eso que se abren las puertas a las mercancías y productos, mientras se le cierran las oportunidades a la persona humana.

“Se llevan nuestra riqueza y ahora rechazan nuestra pobreza”, señaló el titular del Conadeh.

Pese a que la persona es el bien supremo de las sociedades y del Estado, considera que en la práctica lo que se promueve es la sistematización de la discriminación cuando lo que se debe construir es la solidaridad interamericana.

Reiteró que la emigración no debe ser criminalizada por los Estados receptores pues con esto violentan los derechos humanos de esta población, al suprimir, sin justificación fundamentada y en forma irrazonable y desproporcional, las libertades y derechos fundamentales de estas personas.

Tanto en el Senado como en el Congreso de los Estados Unidos habían, hasta el 2006, al menos ocho proyectos de ley que buscaban regularizar de manera temporal y permanentemente a más de 12 millones de indocumentados, la mayoría de origen centroamericano.

En ese mismo año, en el Senado Estadounidense se discutió el denominado Plan Specter, que reunía los planteamientos de las iniciativas conocidas como McCain- Kennedy, Cornyn Kyl, el Plan del Presidente Bush y la propuesta HR-4437, que se le denominó la Reforma Comprensiva, porque proponía la creación de un nuevo tipo de visa para trabajadores extranjeros, de carácter temporal.

El 1994, Estados Unidos inició la construcción de una muralla física en su frontera con Méxicocon el propósito de impedir la entrada de inmigrantes ilegales, sobre todo mexicanos y centroamericanos procedentes de la frontera sur hacia territorio estadounidense.

Al respecto, Custodio opinó que la construcción de un muro en la frontera entre México y los Estados Unidos de América, lo único que profundiza es la división entre los pueblos y las naciones del continente.

Custodio también se refirió a la Ordenanza 2952 que obligaba a los empleados municipales de la ciudad de Farmer´s Branch, Texas, a darle cumplimiento a leyes migratorias federales que restringían el derecho de los emigrantes al acceso a la vivienda.

La ordenanza fue suspendida por la Corte Federal de Dallas, Texas, por la falta de competencia de las autoridades municipales mencionadas para imponer leyes migratorias federales.

También calificó de “contenido antiinmigrante” la ley SB1070 de Arizona, por violentar el principio de presunción de inocencia, al estimular la utilización de perfiles raciales que afectarían no sólo a los inmigrantes sino también a los ciudadanos estadounidenses de origen latino o nativos americanos residentes en esa zona.

La justificación de que la ley SB1070 ayudaría a combatir el crimen de manera más eficiente, no es cierta, según Custodio, porque el sistema de justicia y legislativo de los EEUU contempla sistema para comprobar el status migratorio de las personas que son detenidas por la comisión de crímenes.

Este miércoles, el Estado de Florida anunció que buscará endurecer sus leyes de control de la inmigración ilegal y dotar a la policía de mayores facultades para detener a personas sospechosas de ser indocumentadas.

Custodio manifestó que este tipo de cosas generan una predisposición racial por lo que “estoy dando la señal de alerta para indicarle a la autoridad competente, que es la Secretaría de Relaciones Exteriores, de la necesidad de actuar como Estado, porque estas cosas cuando nos ofenden, son una ofensa nacional”.

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