Le cae “todo el peso de la ley” a policía de escala básica por cobrar “mordidas”

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Tegucigalpa – Contrario a lo que ocurre con altos oficiales de la Policía Nacional señalados de participar en delitos emblemáticos, en las últimas horas la Fiscalía hondureña logró una sentencia condenatoria de seis años tres meses de reclusión para un policía preventivo que fue grabado cobrando “mordidas” a conductores en el Anillo Periférico de Tegucigalpa.

– En este caso el MP actuó de oficio luego que un medio televisivo presentó un video retratando el acto ilegal.

De acuerdo al informe oficial, la Fiscalía para la Transparencia y Combate a la Corrupción Pública (Fetccop) obtuvo una sentencia condenatoria contra un expolicía preventivo, quien responde al nombre de Heber Ulises Merlo Centeno, quien fue sujeto de un proceso penal por los delitos de cohecho y violación a los deberes de los funcionarios.

En este caso la acusación del Ministerio Público en contra del que en su momento fue policía se produce posterior a la investigación que la Fetccop realizó de oficio luego que un medio de comunicación televisivo difundiera imágenes del momento en el cual, el uniformado, pedía “mordida” a un ciudadano, quien fue requerido por la autoridad policial a inmediaciones de la colonia Hato de Enmedio, específicamente a la altura del Anillo Periférico.

Según la denuncia pública, Merlo Centeno pidió “mordida” al ciudadano a cambio de no realizarle la respectiva esquela ante una supuesta infracción de la Ley de Tránsito por parte del ciudadano, el hecho, al ser documentado orilló a la Fetccop a judicializar el expediente y acusar penalmente al entonces policía por los delitos anteriormente descritos.

Por lo anterior y tras haber probado los hechos, la Sala Cuarta del Tribunal de Sentencias declaró culpable al imputado, por lo que la condena es por seis años y tres meses de reclusión más las penas accesorias de inhabilitación absoluta por el doble de tiempo que dura la condena.

Es importante mencionar que muchos casos similares, que involucran a altos oficiales de la Policía hondureña, ni siquiera logran requerimientos fiscales por parte del MP. Sin embargo al agente Merlo Centeno le cayó “todo el peso de la ley”.

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