Bruselas – La selección de fútbol de Bélgica viajará en autobús este sábado a Ámsterdam para disputar un partido de la Liga de Naciones contra Países Bajos, una elección de medio de transporte que choca con los viajes en avión para cortas distancias muy criticados en las últimas semanas a otras agrupaciones.
La decisión de viajar en autobús, confirmada a Efe por la Federación de fútbol belga, permitirá a los Diablos Rojos cubrir los 230 kilómetros que separan Bruselas de Ámsterdam en unas dos horas y media, cuando en avión habrían tardado unos 50 minutos.
Las emisiones de CO2, sin embargo, son la mitad en autobús (80 gramos por kilómetro) que en avión (160 g/km), considerado el medio de transporte que más contamina, sobre todo en vuelos de corta distancia y con pocos pasajeros, según la Agencia Europea de Medio Ambiente.
Esta huella de carbono ha estado en el centro de las críticas que les llovieron a principios de mes, incluso desde el Gobierno francés, al delantero del PSG, Kylian Mbappé, y su entrenador, Cristophe Galtier, por reírse en una rueda de prensa de la sugerencia de que viajasen en tren en lugar de en avión a Nantes, a apenas 400 kilómetros de París.
Esta misma semana la selección española de fútbol ha sido también muy criticada, sobre todo en redes sociales, tras viajar de Madrid a Zaragoza en avión a pesar de que el trayecto de unos 350 kilómetros puede hacerse en apenas una hora y cuarto en tren de alta velocidad, el medio de transporte menos contaminante.
Y durante la Laver Cup de tenis un partido tuvo que ser interrumpido cuando un hombre prendió fuego a su brazo en plena pista para protestar por el uso de aviones privados en Reino Unido.
La polémica por la utilización de estos jets en un momento en que los gobiernos piden a los ciudadanos esfuerzos para luchar contra el cambio climático no es exclusiva del mundo del deporte: profesionales del espectáculo como Kylie Jenner o el rapero Drake han estado también en el centro de las críticas tras hacer vuelos privados de apenas 15 minutos.