En una conferencia de prensa en inglés, el polémico presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció que la criptodivisa BITCOIN circulará como moneda oficial de su país [1], convirtiéndose en la primera nación del mundo en reconocer y adoptar este criptoactivo como una divisa oficial.
Si bien la decisión a simple vista pareciera ser muy acorde al momento histórico, esconde de fondo muchos riesgos asociados.
¿Por qué es tan peligroso y problemático adoptar el BITCOIN como una Divisa oficial?
En 2008, Satoshi Nakamoto [2], un personaje enigmático a quien se le atribuye ser el padre del BITCOIN, publicó un artículo que describía un novedoso y complejo sistema informático, basado en la tecnología P2P (Punto a Punto), diseñado para el intercambio de valores digitales, mediante el uso de códigos cifrados de alta complejidad y seguridad, a través de una red distribuida y sin el requerimiento de un servidor o banco central.
Posteriormente, en 2009, fue lanzado de forma oficial y por primera vez el software Bitcoin, creándose así la red que lleva el mismo nombre y por consiguiente las primeras unidades bajo el concepto de moneda digital [3].
A diferencia de las divisas físicas, como el dólar, que es dinero fiduciario (es decir, que su valor depende solamente de la confianza) emitido por la Reserva Federal, soportado en la creación de deuda, distribuido a través de los bancos comerciales e impreso en papel, el bitcoin utiliza un sistema de prueba de trabajo para simular el “minado” de materias primas, como un sistema productivo virtual.
En teoría, el precio de los bitcoins se acerca al costo marginal de producción de la misma minería virtual (energía eléctrica, software, hardware, mano de obra, etc.), cuya escasez no es, por obvios motivos, «natural», sino generada a través de un algoritmo matemático [4].
Esto llevó al economista George Selgin a denominar el valor del bitcoin como “materia prima sintética”, pero que en el caso del precio de mercado se comporta igual que cualquier bien tangible en virtud de la apreciación y depreciación en el proceso de oferta y demanda.
La decisión de Bukele
Para la imagen y las relaciones públicas del alternativo presidente Milenial de El Salvador, Nayib Bukele, resulta muy positiva la adopción del Bitcoin como moneda oficial, ya que produce en la opinión pública la sensación de una actualización adecuada a los nuevos tiempos para la economía salvadoreña, proyectándose, por demás, como un joven RockStar del mundo GEEK, un bálsamo que encaja muy bien con su relajada forma de gobierno basada en los medios sociales y la inmediatez del mundo hiperconectado [5].
Luego de las recientes elecciones pasadas, Nayib Bukele quedó con el control de las mayorías parlamentarias, razón por la cual la toma de decisiones tan radicales, le resultan muy fácil de implementar sin oposición en el legislativo [6].
El riesgo que esconde el Bitcon
Uno de los motivos para que El bitcoin es altamente apreciado, aún sin poseer un respaldo fiduciario que lo sustente, es que se ha convertido en los últimos años en el medio de pago preferido en la dark web o “internet oscura”, convirtiéndose en el soporte financiero de un sinnúmero de actividades delictivas que acontecen en el ciberespacio, especialmente el denominado: “ransomware” o “secuestro digital”, un dolor de cabeza que ha paralizado gobiernos, clínicas, centros educativos, empresas, centrales eléctricas.
El episodio más reciente de un “ransomware”, fue el bloqueo a uno de los oleoductos más importantes de los Estados Unidos, que dejó varios días sin gasolina varios estados, obligando a sus dueños a a pagar una millonaria suma de dinero por el rescate [7].
Teniendo en cuenta que el número de Bitcoins circulantes en el mercado, es limitado por la estructura misma del sistema mediante un modelo distribuido que lo respalda y por el mecanismo de minería que el subyace, a medida que los ciberdelincuentes lo exigen como pago para los rescates, empieza a ser demandado y ante la escases en la oferta disponible, su valor comienza a crecer, lo que ha generado que de 20 centavos de dólar que fue el precio inicial de 1 Bitcoin, pase a valer en el presente en promedio unos 40 mil dólares por unidad, sin embargo y ante la falta de un banco central emisor, dicho valor presenta grandes oscilaciones con cada episodio en el entramado de los mercados globales.
Justamente por esta misma razón, hace solamente algunas semanas, la Asociación Nacional de Finanzas de Internet de China (NIFA, sigla en inglés), la Asociación Bancaria de China (CBA) y la Asociación de Pagos y Compensación de China, por órdenes el del gobierno central, tomaron la decisión de prohibir expresamente cualquier tipo de transacción con criptodivisas, justamente por ser una moneda sin respaldo alguna, sustentada en el delito y el crimen como principal garantía sobre su valor [8].
Las tres asociaciones también destacaron los riesgos asociados a estas monedas virtuales alegando que “no están respaldadas por un valor real”, por lo que sus precios se manipulan fácilmente y los contratos comerciales no están protegidos por la ley del país.
Lavandería: “El Salvador”
Posiblemente, la decisión del gobierno de BUKELE, podría desencadenar una migración de capitales delictivos hacia el pequeño país centro americano sin precedentes, en especial, porque el banco central de la nación no emite una moneda propia, sino que el dólar es la moneda oficial circulante [10] y al ser El Salvador, el único país que no ejercería restricciones legales sobre la circulación del BITCOIN, se podría convertir en “La Lavandería” del mundo, a través de una ecuación perfecta para el saneamiento de capitales criminales globales.
Al comenzar a circular la criptodivisa sin restricciones en toda la economía nacional, cualquier criminal encontraría la forma de diluir y atomizar sus activos delictivos dentro de este mercado, convirtiendo código a dólares, en cuestión de segundos, cerrándose el circulo de la impunidad, toda vez que al ser descentralizada la operación del BITCOIN, es casi imposible de rastrear.
Algunas aseguradoras y organismos de inteligencia de países del primer mundo, han logrado identificar a los ciberdelincuentes, cuando intentan cambiar grandes sumas de Bitcoin en dinero, algo que ya no tendrían que hacer, si por ejemplo, convierten sus criptocapitales a dólares, a través de miles de pequeñas operaciones dentro de la economía salvadoreña.
Es importante también recordar, que este país es uno de los epicentros históricos de tráfico de drogas hacia Estados Unidos y que conviven en esta nación, grupos de pandillas al margen de la ley, conocidas como “Maras”, que sumadas al potencial flujo de capitales ilegales, podría volver este territorio, en una bomba de tiempo social y económica.
Un problema energético
Las actividades delictivas ocultas detrás de las criptodivisas no son el único problema que enfrenta la decisión de Bukele.
El proceso de “minado” de cualquier criptodivisa, pero especialmente del BITCOIN, consume grandes cantidades de energía, toda vez que requiere de muchas computadoras trabajando en el proceso de encriptación, lo cual a nivel global representa unos 129 TWh [11] (el equivalente al 0,6% del consumo energético mundial).
Consciente de la alta demanda energética que desencadena el minado de todas las transacciones que ocurrirán a partir de ahora en El Salvador, el presidente Bukele ordenó la creación de nuevas estaciones GEOTERMICAS, es decir de producción de energía a partir del calor que producen los abundantes volcanes del país [12], como alternativa para compensar la huella de carbono derivada de la operación de los criptoactivos.
Muchos otros problemas no previstos
La ley aprobada por la Asamblea Legislativa de El Salvador obliga a todos los negocios a ofrecer Bitcoin como método de pago, al tiempo que los ciudadanos podrán pagar sus impuestos en Bitcoin, por lo que las finanzas públicas estarán expuestas a las repentinas devaluaciones de esta criptomoneda, la cual ha llegado a caer hasta en 22% en un solo día.
Pero no solo se arriesgan las finanzas públicas, también el presupuesto familiar de los salvadoreños, que podrían observar como en un mismo día su capital se puede devaluar hasta un 20%, algo que con el dólar no ocurriría ni en una década.
Pero sin duda el mayor problema que se deriva de la implementación del BITCOIN, es la baja capacidad del sistema distribuido para procesar suficientes transacciones por segundo, que en el caso por ejemplo de Mastercard es de 45.000 transacciones en ese periodo de tiempo, Visa supera las 65.000, mientas el BITCOIN promedia solo 7 transacciones en un segundo, lo que la hace ineficiente como moneda de pago para transacciones cotidianas, especialmente de bajo valor [15].
En Conclusión, si bien la decisión del presidente de El Salvador de convertir el BITCOIN en moneda de curso legal resulta muy mediática, impacta significativamente en el mundo GEEK, lo posiciona como un líder Milenial fresco y disruptivo, en la practica la decisión esconde grandes riesgos y problemáticas asociadas, que aún no está claro como podrán resolverse, incluyendo la masificación de actividades delictivas y el subsecuente lavado de activos, la alta fluctuación de la divisa que afectará el bolsillo de los ciudadanos el inmenso costo energético, al igual que la ineficiencia del sistema mismo para procesar múltiples transacciones por segundo.