Londres.- El cantante británico James Blunt anunció este miércoles la reedición de su álbum debut, ‘Back to Bedlam’, y aseguró que, si alcanza el número uno en las listas de éxitos 20 años después, cambiará su nombre legalmente a decisión de sus seguidores en redes sociales.
«Mi nombre es James Blunt. Y vosotros tenéis el poder de arruinarme la vida», dijo el cantante en una publicación de Instagram, en la que explicó que, para celebrar el relanzamiento del disco que le «ha mantenido consistentemente rico durante los últimos 20 años» el próximo 11 de octubre, iba a dar a su público la potestad de elegir su nuevo nombre.
Eso sí, para llevar a cabo este proceso legal, el británico impuso una única condición: que los fans logren que ‘Back to Bedlam’ vuelva al número uno de las listas de éxitos dos décadas después de su lanzamiento y aseveró que, de no conseguirlo, no lo hará.
Según explica Blunt, a lo largo de su carrera ha recibido apodos de la talla de ‘el hombre más odiado en la historia del pop’; o juegos de palabras soeces como ‘James Beige’ o ‘James Cunt’, y ahora serán las redes sociales las que escojan su nuevo nombre, en el que calificó como «el momento democrático más importante del año».
«Comenta en esta publicación con sugerencias para mi cambio de nombre, o da me gusta al comentario de otra persona para votarlo. El comentario que más ‘likes’ en todos los perfiles de redes sociales en el momento en el que el álbum se lance, el 11 de octubre, gana. Y es entonces cuando la carrera hacia el número 1 comienza», concluyó Blunt.
Tras su lanzamiento en 11 de octubre de 2004, ‘Back to Bedlam’ se convirtió en el álbum más vendido en el Reino Unido un año más tarde, gracias al éxito global de ‘You’re Beautiful’, y fue el disco británico más vendido del siglo XXI hasta que fue superado por el ‘Back to Black’ de Amy Winehouse en 2011.
Igualmente, hasta la fecha, el de Blunt es el álbum debut más vendido de un artista británico y se ubica como el decimoctavo disco más exitoso de la historia de las listas del Reino Unido. EFE/ir