“Hemos hecho estudios geológicos, análisis de suelos, perforaciones para determinar la altura de la tierra firme y una serie de pasos que contemplan también infraestructuras con blindaje contra los efectos del cambio climático en cada una de las fallas”, explicó Pastor.
Informó de que los avances son significativos también en la reparación de la falla que se encuentra en el kilómetro 6 y que fue reactivada durante la temporada lluviosa. La obra comprende estabilización de taludes, instalación de anclajes y reforestación de la zona afectada; la inversión es de 30 millones de lempiras, financiados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), explicó.
Paralelamente se atienden dos fallas menores en el kilómetro 12 y la falla ubicada en el kilómetro 14, anunció el funcionario.
Aquí, agregó, los trabajos incluyen el cambio de alineamiento de la vía, Entre las obras menores se contempla la construcción de bordillos, señalización preventiva y revestimiento de cunetas.
“En los próximos días iniciará la reparación de otra de las fallas en el kilómetro 16 y al finalizar los trabajos en las fallas, continuaremos con la rehabilitación de toda la infraestructura vial de la carretera a oriente”, añadió.
El ministro declaró que se está trabajando en varias fallas a nivel nacional, especialmente en la carretera hacia el sur del país, en los kilómetros 18, 40, 59, y otra cerca de San Lorenzo, en Valle.
Agregó que para este año cuenta con el apoyo de varios organismos de crédito para atender cerca de 20 fallas en el occidente del país, específicamente entre los departamentos de Copán y Ocotepeque, así como la falla localizada a la altura de la comunidad de Chancaya, en el departamento de Yoro.