En su mensaje de la homilía dominical, el padre Carlos Rubio, hizo un llamado a todos los mensajeros de Dios en Honduras a que sigan predicando el evangelio, no importa si son rechazados por la sociedad, hay que seguir haciéndolo sin claudicar.
“Esa voz profética, nos la hace hoy Dios, a veces por medio de personas importantes, pero otras veces lo hace desde la sencillez de la vida diaria y a través de personas nada importantes que nos dan ejemplo de fidelidad y de verdadera sabiduría, puede ser Teresa de Calcuta o la familia de al lado que tal vez, nos están dando un testimonio clarísimo, si queremos verlo, según el evangelio de Jesús”, apuntó Rubio.
Agregó que “a pesar de la inseguridad hay que seguir predicando, las sociedades de ahora, nuestro pueblo, también se revela, como Israel contra Dios, haciendo obras contrarias a la voluntad de Dios, cuando se irrespeta la vida, cuando se irrespeta la dignidad de las demás personas, cuando se oprime al pobre, cuando se cometen tantas injusticias administrativas con los bienes del pueblo, todo eso ofende a Dios”.
“Volviendo a la inseguridad de nuestro ambiente, eso no debe conducir a un profeta a la cobardía o a la dimisión, no se debe dejar de hablar y dar testimonio; Ezequiel dice que en los momentos más críticos, demandó que siguieran hablando, que hagan o no hagan caso, la responsabilidad será de ellos y así sabrán que hubo un profeta en medio de ellos”, dijo Rubio al exhortar a los feligreses a no acobardarse ir y predicar el evangelio a toda criatura.
