– Paro en hospitales, protesta de maestros y cisma a lo interno de la Policía hondureña marcan la agenda convulsionada del gobierno.
– Dos muertes por falta de insumos en el hospital Catarino Rivas denunciaron los propios galenos de ese centro asistencial.
– Este jueves se anuncian protestas de docentes, sindicalistas y campesinos por el alto costo de la vida y la imparable ola de violencia.
Este país ubicado en el corazón de Centroamérica y con una población de 8.2 millones de habitantes, enfrenta graves problemáticas en los tres rubros anteriormente descritos.
En el campo de la Salud, los médicos especialistas mantienen desde hace 11 días un paro general de labores en los 28 hospitales del sistema sanitario público, lo que ha provocado la cancelación de más de 15 mil consultas externas y unas 400 cirugías, según datos oficiales.
Además, galenos del Hospital Mario Catarino Rivas de la norteña ciudad de San Pedro Sula denunciaron este miércoles que dos personas habían fallecido en las últimas horas en ese histórico centro asistencial producto de la falta de insumos para atención médica.
El médico José Enrique Samayoa afirmó que una de las víctimas pereció porque necesitaba de una ventiladora y el hospital carece de esta maquinaria. Además, otro paciente murió por politraumatismo debido a que requería con urgencia de una tomografía, la que no se le pudo practicar en ese centro asistencial.
El paro de labores que mantienen más de 3 mil galenos a nivel nacional parece no dar visos de solución y con el pasar de los días se agudiza el conflicto que afecta directamente a los pacientes que llegan a consultas a los centros hospitalarios públicos.
Maestros vuelve a las calles este jueves Entre tanto, la dirigencia magisterial anuncia protestas para este jueves en algunas de las principales ciudades de Honduras contra el alto costo de los alimentos y la violencia que está causando a diario más de una veintena de muertos. En Tegucigalpa, la marcha convocada por las principales centrales obreras y dirigentes magisteriales partirá de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM) hasta los bajos del Congreso Nacional. Los maestros exigen el pago de salarios atrasados, algunos desde 2010, la derogación de la Ley Fundamental de Educación y la nueva Ley del Instituto de Previsión del Magisterio (Inprema). Los educadores rechazan la Ley del Inprema por considerar que les afecta el aumento al monto de las cotizaciones y la edad para jubilarse. Los maestros serán acompañados por representantes de organizaciones campesinas y gremiales del país. |
Más de 100 oficiales en disponibilidad mientras recrudece la violencia En cambio, la Seguridad parece ser otra papa caliente en la administración Lobo. Mientras la institución policial pasa por una urgente y necesaria depuración, los crímenes y violencia recrudecen en todo el territorio nacional. El comisionado Aldo Oliva Rodríguez, quien ha pasado a situación de disponibilidad, expresó este miércoles que sostuvo una reunión con más de un centenar de oficiales despedidos de la institución para planear acciones contra el secretario de Seguridad, Pompeyo Bonilla y el director de la Policía hondureña, Juan Carlos “El Tigre” Bonilla. “No es posible que mientras la institución nos necesita, porque los hechos violentos están a la orden de día, el Estado nos esté pagando el salario a más de cien elementos que estamos en situación de disponibilidad”, afirmó Oliva. En las últimas horas, el comisario Henry Amador Roque, jefe de la posta policial del barrio Belén, murió asesinado en un sector de la capital, presuntamente por el robo de su camioneta, la que apareció horas después en otra parte de la ciudad. Ante estos hechos, la ex titular de Asuntos Internos de la Policía Nacional, María Luisa Borjas, manifestó que dentro de la institución hay bandas criminales y agregó que existe inconformidad por las pruebas de confianza que realiza la DIECP. Borjas arguyó que “dentro de la Policía existen varias bandas, lo que ha generado enfrentamientos por diversos intereses, muchos veces son económicos y hasta por autoprotección”. Asimismo, desvirtuó que exista una verdadera depuración en el cuerpo policial. |