“Hago un llamado a los secuestradores de mi padre para que le respeten su vida, nosotros no somos personas acaudalas, no somos millonarios, lo que somos se lo debemos a mi papá que con esfuerzo y sacrificio lo ha hecho”, dijo Rosibel.
“Mi padre es un hombre brillante, sincero, humilde, un hombre acostumbrado a decir la verdad, ese a sido su único pecado”, agregó.
Rosibel Torres dijo entre lágrimas que a una semana del secuestro de su padre han tenido “comunicaciones muy breves con los secuestradores”, a quienes les pidió cuidarlo, ya que él es un hombre mayor, un hombre enfermo.
Torres pidió al presidente de la república, Manuel Zelaya, al presidente del Congreso Nacional, Roberto Micheletti, y a los colegas de su padre “para que analicen esta situación que está sucediendo en este país y se unan con nosotros porque el dolor que yo siento es muy grande, no se los puedo explicar”.
“Es duro vivir esta situación, jamás pensé vivirla, porque mi padre no le hace daño a nadie y nunca ha atentado contra la vida de nadie”, apuntó.
Llamó a los hondureños a unirse a su familia en oración por la libertad del veterano periodista, ex diputado al Congreso Nacional y ex vicealcalde de Tegucigalpa.
Rosibel Torres hizo el llamado en el acto de entrega del Premio Nacional de Prensa “Álvaro Contreras”, entregado este año al periodista Renato Álvarez, quien la invitó a participar en el acto en solidaridad con el comunicador secuestrado.
Torres fue galardonado con la misma presea en 1998.
