El ex titular del Ministerio Público también señaló que “definitivamente, ahí lo que se cometió fue un golpe de Estado técnico, se desintegró un poder de Estado y todavía está desintegrado porque hay un magistrado que no está nombrado”.
Agregó que “está defenestrado uno y el otro no está, entonces son poderes del Estado incompletos y si no está completo, definitivamente estamos hablando de un golpe de Estado”.
Orellana Mercado aseguró que con la destitución de cuatro de los cinco magistrados de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), existe una interrupción del orden constitucional.
“La Corte Suprema está incompleta y eso significa que aquí hay un poder del Estado que no está completo y en consecuencia hay una interrupción del orden constitucional”, insistió.
En ese sentido, refirió que con esa acción, Honduras corre el riego de ser sancionada a través de la cooperación internacional.
Detalló que el país podría ser objeto de señalamientos que se realicen en cuestionamientos de comisión de juristas, de organismos de derechos humanos y otros.
Además dijo que tales señalamientos podrían alejar la inversión extranjera del país.
La noche del martes y madrugada del miércoles se cabildeó en el hemiciclo Legislativo la destitución de los ahora ex magistrados de la Sala de lo Constitucional, José Antonio Gutiérrez Navas, Gustavo Enrique Bustillo Palma, Rosalinda Cruz Sequeira y José Francisco Ruiz Gaekel.
En su lugar se nombró a Silvia Trinidad Santos, Víctor Manuel Lozano, Germán Vicente García y José Elmer Lizardo Carranza.
