Tegucigalpa – Un teléfono satelital oculto en un balón de fútbol pretendieron introducir privados de libertad a la cárcel de máxima seguridad en Ilama, Santa Bárbara, conocida como El Pozo, informó este lunes la Fuerza Nacional de Control de Centros Penitenciarios (FNCCP).
“Aquí podemos observar un balón de fútbol. En las tardes ellos (reos) se entretienen, se les da una hora de actividad deportiva, este balón salió de los predios del centro penitenciario, pero a su retorno ya venía con un (teléfono) satelital introducido y esto fue detectado por el escáner y fue identificado por el personal de monitoreo”, desglosó.
Así lo ilustró el Omar Ramos en una comparecencia pública en la que también participaron: el presidente Juan Orlando Hernández; el jefe de las Fuerzas Armadas, René Ponce Fonseca; el director de la Policía, José David Aguilar Morán; y el encargado de la Policía Militar, Manuel de Jesús Aguilera.
Mencionó que la FNCCP sirve de apoyo al INP con avanzadas herramientas tecnológicas.
“La Fuerza cuenta con un equipo nuevo, tenemos un body scan y un espectro 100/100 que no es dañino para la sociedad ni para las personas, es un equipo que cuenta con una protección radiológica y que ha sido certificado por la Comisión Internacional Nuclear de Brasil”, desglosó.
Ramos relató que en los predios de los centros penitenciarios hay personal ajeno al Instituto Penitenciario, que son amigos de los privados de libertad con radios comunicadores y celulares.
Reveló que todos los días se encuentran notas extorsivas en poder de internos en las diferentes cárceles del país.
El oficial de las FFAA apuntó que se implementan nuevas herramientas tecnológicas para impedir que los recintos sean vulnerados.
Campaña para desacreditar controles
De su lado, el presidente Juan Orlando Hernández expresó que “en ese sentido es importante para nosotros hacer del conocimiento público algunos hallazgos bajo el entendido que cuando iniciamos esta lucha de frente por recuperar la paz y la tranquilidad de Honduras montamos una serie de acciones, pero una de ellas era crucial y hasta el segundo año del gobierno anterior le entramos a profundidad que fue la reestructuración del sistema carcelario”.
“Esa reestructuración pasó por construir dos cárceles con diferentes módulos, pero dentro de ellos uno es de máxima seguridad y eso es vital y pieza clave en la lucha por recuperar la paz y la tranquilidad de Honduras”, presidente Hernández.
Hay que recordar -prosiguió- cómo estaban los centros penales antes de nuestro gobierno, escuelas del crimen, centros de operación desde donde se ordenaban asesinatos, extorsiones, secuestros, distribución de drogas”, presidente Hernández.
“Pero ahora que decidimos cambiar la manera de operar nos miramos sometidos todos los días a una serie de ataques tanto buscar penetrar los centros penales, buscar desacreditar las decisiones que se han tomado, buscar desacreditar todo el esquema y obviamente esta es una situación orquestada, es una conspiración contra el pueblo hondureño que queremos que de ahora en adelante podamos debatirla públicamente para que cada quien identifique de qué lado estamos cada uno de nosotros”, afirmó el presidente Hernández.
Reveló que “los abogados de los líderes de la pandilla 18 y sus parientes fueron a los juzgados de ejecución de San Pedro Sula y de El Progreso a pedir que no siguieran estos líderes criminales que el Instituto Nacional Penitenciario los tiene catalogados como de alta peligrosidad que no siguieran en las celdas de los módulos de alta peligrosidad”.
A renglón seguido, Hernández indicó que “entonces la resolución indica que tienen que salir de esas celdas y estar en los lugares comunes, donde es más fácil comunicarse y trasladar información”.
“Cuando se emite la resolución coincide con que se disparan los números de muertes. Una de las causas, a nuestro juicio, tiene que ver con que ellos salen de las celdas de máxima seguridad y donde deben de estar la mayor parte del día allí obviamente con su alimentación con todo lo que dice la ley y los estándares internacionales”, explicó.
“Pero lo que ordenó el sistema judicial a través de estos dos jueces fue que salieran”, presidente Hernández.
