La policía sueca ha dado por finalizada la acción de rescate de los cinco militares tras haber contactado con las autoridades noruegas y los familiares de las víctimas.
«El motivo es que hemos encontrado muchos restos del avión siniestrado en el área de búsqueda y también fragmentos de cuerpos humanos», dijo hoy Börje Öhman, portavoz de la policía de Norrbotten, al norte de Suecia.
Öhman informó de que fueron perros policiales los que encontraron los restos humanos en una ladera del Kebnekaise, la montaña más alta de Suecia con 2.103 metros y donde se estrelló el avión, un Hércules C-130J, por causas que se desconocen.
Aunque se da por finalizada la acción de rescate, las autoridades continuarán rastreando la zona en busca de más restos.
Pruebas de ADN de los fragmentos de cuerpos hallados hoy serán enviadas a Noruega para ser analizadas allí.
Los equipos de rescate habían encontrado horas antes gran cantidad de restos del avión en la cara oeste del Kebnekaise, en un área de muy difícil acceso, y a esa zona fueron transportados luego varios perros para labores de rastreo.
El avión siniestrado, uno de los cuatro Hércules C-130J de reciente fabricación adquiridos por Noruega en los últimos años, había despegado del aeropuerto de Evenes, en el norte de Noruega, a las 13.30 del jueves, pero desapareció del radar 23 minutos después, cuando sobrevolaba la Laponia sueca, rumbo a Kiruna.
El ministerio de Defensa noruego llegó a dar por muertos en un comunicado a sus cinco militares, pero minutos después rectificó la información, lamentando el error que se había producido y concediéndoles estatus de desaparecidos.
El avión participaba en Cold Response 2012, unas maniobras militares internacionales dirigidas por Noruega que reúnen desde principios de marzo a unos 16.000 soldados de 14 países en el norte de Escandinavia.