Roma – El centro de detención para migrantes de Gjader, en Albania, estuvo operativo sólo cinco días en 2024, con un coste diario de 114.000 euros, según un informe publicado este miércoles por la ONG ActionAid que ha desatado duras críticas contra el Gobierno de la ultraderechista Giorgia Meloni por el elevado gasto público de su polémica iniciativa.
«La ‘Operación Albania’ es el instrumento más costoso, inhumano e inútil en la historia de las políticas migratorias italianas», indica la ONG en su informe, en el que junto a la Universidad de Bari (sur) «reconstruye por primera vez cuántos millones se han destinado a la habilitación de los centros hasta marzo de 2025, pese a no ser completados».
El Ejecutivo de Meloni abrió dos centros en 2024 en Albania, tras alcanzar un acuerdo con ese país, para expulsar desde allí a los inmigrantes interceptados en el Mediterráneo central sin derecho a asilo pero tras semanas inutilizados por las trabas de la Justicia, los convirtió en centro de espera de la repatriación (CPR) como los del territorio italiano.
Según denuncia el informe, el centro de Gjader, gestionado por la entidad Medihospes y financiado por la Prefectura de Roma, supuso un gasto total de 570.000 euros por la detención de 20 migrantes entre mediados de octubre y finales de diciembre de 2024.
Todos los detenidos fueron liberados en pocas horas, se lee en el documento.
Además, se habrían invertido 74,2 millones de euros en la construcción de las instalaciones de Gjader y Shengjin, con una media de 153.000 euros por cada plaza disponible, frente a los poco más de 21.000 euros por plaza en estructuras similares en Italia, como el centro de Porto Empedocle, en Sicilia (sur).
También se explica que solo en gastos de alojamiento y restauración para el personal policial desplazado se destinaron 528.000 euros en cinco días.
Meloni espera en las próximas semanas el pronunciamiento del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sobre los controvertidos centros, que no han podido funcionar plenamente por la negativa de los jueces italianos a convalidar el arresto en ellos.
La líder del Partido Democrático (PD), el mayor de la oposición, Elly Schlein, calificó la operación como “un insulto a los italianos” e instó a Meloni a pedir disculpas.
“Después de años criticando los 35 euros al día por la acogida, hoy se revela que el Gobierno ha malgastado 114.000 euros diarios por cada migrante detenido en Albania”, afirmó.
También el líder del Movimiento 5 Estrellas (M5S), Giuseppe Conte, arremetió contra la gestión del Ejecutivo, que «no encuentra 6 millones para mamografías y recorta fondos para víctimas de mafia y feminicidios, pero ha cargado a los italianos los costes de un spot publicitario de Meloni en Albania”.
Por su parte, fuentes del Ministerio del Interior calificaron los centros de Albania como «una inversión fundamental» y «una respuesta concreta, estructurada y eficaz que permitirá, una vez en funcionamiento, reducir drásticamente los costos de acogida y acelerar las repatriaciones».
Además «un modelo apreciado» por muchos países de la Unión Europa.
«Italia ya no puede permitirse la política de ‘puertas abiertas para todos’ y una acogida sin reglas» y » el acuerdo con Albania ha permitido la creación de centros útiles y necesarios», añadieron.
La idea inicial de Meloni era destinar a los centros a los inmigrantes rescatados en el mar que no tuvieran derecho al asilo, varones sanos y procedentes de países considerados seguros, pero los tribunales italianos se negaron a convalidar las detenciones en Albania y recurrieron al TJUE, cuya sentencia se espera en breve. EFE
(vc)