Tegucigalpa/Bogotá/Caracas/Asunción/Quito – Las dos principales fuerzas que crean inestabilidad y destrucción, el hombre y la naturaleza, se unieron en menos de 24 horas para llevar luto, destrucción y crisis institucional a tres países de Sudamérica en forma simultánea, mientras un cuarto comienza los trabajos de recuperación, también azotado por los efectos naturales.
– Más de 200 muertos dejan lluvias en Colombia. Venezuela y Paraguay se recuperar de crisis políticas.
Mientras Paraguay y Venezuela comienzan a recoger los pedazos y con ello recomponer sus sistemas institucionales tras sendas crisis políticas, Colombia enfrentó la furia de la naturaleza cuando una avalancha provocada por los desbordamientos de tres ríos ha dejado 193 muertos y decenas de desaparecidos.
Crisis institucionales
Paraguay comenzó a hacer un recuento del daño político que dejó la resolución del Congreso de aprobar la figura de la reelección presidencial, lo que provocó la ira de la oposición, que mediante sus activistas se lanzaron a las instalaciones legislativas y prendieron fuego a parte del edificio.
¿Qué país de Sudamérica concita el centro de atenciones este fin de semana?
— Proceso Digital (@ProcesoDigital) 1 de abril de 2017
Las protestas, reprimidas por la policía, se saldaron con la muerte de un joven opositor y más de 200 detenidos.
Pero ante la indignación de la oposición y de parte de la población, el presidente Horacio Cartes destituyó al ministro del Interior, Tadeo Rojas; y al jefe de la policía, Críspulo Sotelo.
Pero el enfrentamiento político continúa, ya que tanto el derechista partido Colorado del presidente Cartes y su aliado en la reelección, el izquierdista Frente Guasú del expresidente Fernando Lugo, no han dado muestras de dar marcha atrás, a pesar del rechazo del partido Liberal, el mayor de la oposición parlamentaria, así como otras fuerzas minoritarias.
Maduro da marcha atrás
Por su lado el presidente venezolano Nicolás Maduro y su bloque chavista dieron marcha atrás en su medida de disolver la Asamblea Nacional, el poder legislativo, instrumentalizando para ello el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de la nación petrolera.
El TSJ había emitido una resolución judicial donde quitaba al parlamento las atribuciones y las asumía la instancia judicial, lo que fue calificado como un “golpe de Estado” por la mayor parte de la comunidad internacional.
Pero la sorprendente reacción de la calificada chavistas y titular del Ministerio Público de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, que calificó la decisión de la justicia como una auténtica “ruptura del orden constitucional” cayó como un balde de agua fría en el Palacio de Miraflores, sede de la Presidencia venezolana.
La apuesta de Ortega Díaz, todavía no entendida por el arco político venezolano, más la presión internacional, hizo que Maduro convocara al Consejo de Defensa y Seguridad y pidiera al poder judicial revertir la medida.
Pero todos los sectores políticos son claros también que la reversión de las competencias a la Asamblea Nacional, dominada por la oposición, no significa un cambio real, ya que el parlamento previamente había sido vaciado de poderes.
Con ello Maduro desactivó una crisis adicional en Venezuela, pero todavía tiene que lidiar con la catástrofe económica y social que vive la nación petrolera.
Ecuador hoy por el sucesor de Correa
Calma y normalidad en Ecuador en el último día de reflexión para los ecuatorianos, quienes acuden este domingo a las urnas para elegir al presidente de los próximos cuatro años, sucesor al frente de la República del hombre que ha gobernado por una década: Rafael Correa.
Cerca de 13 millones de ciudadanos ecuatorianos y residentes extranjeros decidirán entre los dos candidatos más votados en la primera vuelta del pasado 19 de febrero: el oficialista Lenín Moreno, de Alianza País (AP, izquierda) y el opositor Guillermo Lasso, del movimiento Creando Oportunidades (CREO, centroderecha).
La última jornada de reflexión mostró una rebaja obligatoria en el grado de confrontación política debido al «silencio electoral», pero no fue un mutis absoluto. Ambos candidatos aprovecharon la falta de regulación electoral sobre la publicación en redes sociales para lanzar sus últimos mensajes.
Tragedia vuelve a golpear a Colombia
Por su lado los latinoamericanos volvieron a ser sacudidos por las noticias de otra tragedia, esta vez provocada por la naturaleza y que afecta a Colombia con más de 200 muertes.
La súbita crecida de tres ríos, tras intensas lluvias en las primeras horas del sábado, arrasó varios barrios de Mocoa, la capital del departamento selvático del Putumayo.
«Lamentablemente la más reciente cifra por tragedia en Putumayo es: 193 fallecidos y 202 heridos. Solidaridad con sus familias», escribió el presidente colombiano Juan Manuel Santos en su cuenta en la red social de Twitter sobre esta tragedia causada por un fuerte aguacero que hizo desbordar el río Mocoa y sus afluentes Sangoyaco y Mulatos.
La tragedia supera el más reciente desastre natural de Colombia, el de otra avalancha que destruyó el 18 de mayo de 2015 la localidad de Salgar, en el departamento de Antioquia, dejando al menos 104 muertos.
El presidente Santos explicó que cayó en Mocoa cerca del 45 % de la lluvia que normalmente cae en un mes, y ese volumen de agua «produjo la avalancha».
La riada pasó por 17 barrios, de los cuales los más afectados fueron los de San Miguel, Progreso e Independencia, que están más cercanos al curso del río Mocoa, según dijo el comandante de la Brigada 27 del Ejército, general Adolfo Hernández
Perú se recupera
Por su lado el gobierno peruano anunció que lanzará un programa de emergencia para dar empleo a más de 20 mil personas, todas afectadas por las lluvias, inundaciones y deslizamientos de semanas atrás.
Los trabajadores deberán de laborar en un plan para reubicar 31 mil casas, así como dar mantenimiento a los refugios instalados para atender a los damnificados.
Perú afronta desde diciembre una emergencia climática causada por el atípico fenómeno de «El Niño costero», que se manifiesta cuando el calentamiento de las aguas del litoral genera intensas lluvias, que devienen en inundaciones y aluviones, principalmente en el norte y el centro, incluida Lima, la capital del país.
Las lluvias e inundaciones en el país han dejado, hasta el momento, 101 muertos, 19 desaparecidos, 353 heridos, 140 mil damnificados y cerca de 940 mil afectados, según el último balance gubernamental.
