Rodríguez criticó también «la teología de la sumisión», que gobernó el país durante décadas, «a través de un sofisticado sistema de dominación mediática».
El fiscal general ofreció sus declaraciones en la sede central de la empresa estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA), dentro de un foro llamado «Terrorismo mediático», el cual definió como un «acto de violencia silenciosa» en busca de «la utilización calculada de una amenaza permanente destinada a mantener una ideología».
Citó especialmente al canal privado opositor Globovision, al que señaló que su apelativo de «la televisión combativa» sólo tiene como objetivo «combatir por recuperar sus propios privilegios».
El fiscal, que fue el primer vicepresidente del Ejecutivo de Chávez, calificó el proceso político actual venezolano de «histórico» y señaló que hay que cambiar «el rumbo a Venezuela» y dirigirla hacia «la gente más necesitada y que nunca ha tenido poder en este país».
En este sentido, arremetió contra la «clase dominante que, frente a los cambios, ha sentido que ha perdido poder (…) y que va a perder definitivamente todo el poder que tuvieron alguna vez».
Rodríguez también se refirió a la responsabilidad ante ello de los venezolanos, quienes, opinó, se quedaron «quietos ante esa arremetida durante años». «Hasta que apareció Chávez, el primero que enfrentó el terrorismo mediático y nos enseñó que la única forma de hacerle frente es denunciarlo», agregó.
