Tegucigalpa – Una gran cantidad de feligreses abarrotaron la mañana de este jueves la Iglesia Catedral San Miguel Arcángel, para participar en una jornada de oración por 48 horas para despedir este año y dar la bienvenida al 2016.
La jornada denominada “Horas Santas”, es encabezada por el cardenal Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga.
Al iniciar la jornada, el cardenal se refirió a la misericordia y pidió a los hondureños dejar atrás lo negativo y pensar en los positivo para el año que está por comenzar.
Asimismo, el purpurado pidió fijarse metas espirituales y no sólo metas materiales para el próximo año.
“Yo quisiera que terminando este año, hacer una confesión, dejar atrás lo negativo y empezar con entusiasmo y alegría, con la bendición de Dios, eso el don de la misericordia”, manifestó.
Pidió que “el año nuevo no sea ruido sino que sea gracia; necesitamos de ese silencio para poder encontrarnos y encontrar al Señor; hay personas que no piensan que su vida es una tarea, un regalo y una tarea para construir y en ello decir, este año yo quiero alcanzar estas metas y no únicamente metas materiales sino sobre todo metas espirituales”.
Señaló que el proyecto que tiene Dios en cada persona, es que sea una obra de arte no una “chambonada” cualquiera y la obra de arte se llama santidad.
El prelado preguntó que cuántos problemas se podrían evitar si las personas fuesen valientes y en ese sentido, muchos consultorios de los profesionales de la medicina quedarían vacíos porque hay tantas enfermedades que vienen de la impaciencia.
“Hay algunos que se dejan dominar por las cosas y las personas no pueden ser esclavas de las cosas, no se puede ser esclavo de una botella de alcohol y en este día de fin de año y de principio del próximo año, hay una canción que están poniendo todas las radios, yo no olvido el año viejo, pero lo mejor sería yo no olvido el año nuevo, porque viene lleno de bendición, lleno de gracia, lleno de paz y queremos construir algo mejor”, apuntó el líder religioso.
Exhortó a los hondureños planificar un año mucho mejor porque tal como se señala en la Biblia “año nuevo quiere decir, año mejor”.
