Extradiciones, una figura cotidiana en Honduras

Tegucigalpa – Las extradiciones, una figura inimaginable hace una década, se ha vuelto una acción común en Honduras, un país donde el crimen organizado y el narcotráfico logró no solo trasegar droga a través de su territorio, sino que muchos carteles se anclaron en él y le convirtieron en punto clave para desembarcar sus cargamentos por mar y aire, así como hacerlo un lugar para embodegar drogas, procesarlas en laboratorios e incluso para sembrarlas.

– Cada 78 días Honduras extraditó a EEUU a un connacional por narcotráfico

– Carlos “El Negro” Lobo fue el que menos tiempo duró su extradición (43 días), en tanto el expolicía Ludwig Criss Zelaya Romero fue el que más se demoró con 150 días.

– El extraditado este miércoles -Mejía Duarte- operó en la zona del Valle de Sico, en Colón, junto a los cárteles de Los Cachiros y Wilter Blanco.

– 16 extraditados desde Honduras a EEUU, cuatro detenidos fuera del país y 10 entregas voluntarias forman parte de los nacionales que enfrentan procesos en Norteamérica.

También el lavado ha sido parte de las actividades criminales que han mostrado sus colmillos en este país centroamericano.

Los barones de la droga se distribuyeron así el territorio para operar a sus anchas. En Occidente el clan Valle Valle, en el Atlántico y Norte Los Cachiros, en Colón y en La Mosquita el cartel del Atlántico con Wilter Blanco y Carlos “El Negro” Lobo para mencionar algunos. Junto a ellos otros capos y grupos que coexistieron u operaron concatenados.

Héctor Emilio Fonseca, alias “Don H”, el cártel de los AA, personajes como “El Rojo”, un poderoso contingente de policías, entre otros grupos y personajes muestran un extenso catálogo de actores del hampa. Aunque no todos han sido extraditados, ellos y muchos otros de altos quilates criminales, de influencias en el poder y hasta “pequeños peces”, son parte del contexto histórico.

En sus inicios los hombres del narco en Honduras eran poderosos hacendados rurales que poco a poco evolucionaron. Dieron paso así a permear el poder público y privado. Una nueva generación de relevo mostró a los herederos moviéndose en las altas esferas y limpiando capitales.

Los hechos

Las extradiciones de ciudadanos hondureños, que comenzaron en mayo de 2014 y que prosiguieron este día con la entrega de Sergio Neftalí Mejía Duarte y las mismas se traducen en la entrega de un connacional a la justicia de Estados Unidos cada 78 días por delitos de narcotráfico o criminalidad organizada.

Es importante mencionar que en enero de 2012 se ratificó la reforma al Artículo 102 constitucional que dio luz verde a la extradición de ciudadanos hondureños, un procedimiento que estaba prohibido, hasta ese entonces, en la legislación nacional.

No obstante, la vía expedita de este proceso judicial tuvo que pasar un tortuoso camino, ya que no se contaba con un reglamento para consumar las expatriaciones, ordenadas en caso de narcotráfico, lavado de activos y terrorismo. Fue así como la Corte Suprema de Justicia (CSJ) aprobó un auto acordado, el que aún se utiliza en estas operaciones.

Sin embargo, fue hasta hace un poco más de tres años que se logró la primera entrega de un nacional a un gobierno extranjero. La extradición de Carlos Arnaldo “El Negro” Lobo marcó el inicio de estos procesos judiciales allá por mayo de 2014.

La extradición de Lobo se produjo 43 días después de su captura en un complejo residencial de la norteña ciudad de San Pedro Sula. Lobo ya fue condenado a 20 años de cárcel y se prevé saldrá en 2034.

El auto acordado por el Poder Judicial hondureño establece hasta 60 días para ejecutar la extradición, partiendo del momento que el juez da vía libre para su entrega, sin embargo, este plazo se extiende por los recursos que en la mayoría de los casos interpone la defensa de los imputados.

Desde el que más rápido fue expatriado hasta el que más demoró, componen el listado: Carlos “El Negro” Lobo (43 días), Juving Suazo Peralta (48 días), Sixto Obed Argueta G. (61 días), Sergio Neftalí Mejía (65 días), Jairo Arias Mejía (70 días), Miguel Arnulfo Valle (73 días), Luis Alonso Valle (73 días), Noé Montes Bobadilla (82 días) y Carlos Emilio Arita Lara (97 días).

Cierra la nómina: José Inocente Valle (111 días), Marlen G. Amaya (111 días), Juan Carlos Arbizú (115 días), Héctor Emilio Fernández Rosa (122 días), Wilmer A. Carranza (124 días), José Raúl Amaya Argueta (130 días) y Ludwig Criss Zelaya Romero (150 días).

El extraditado de este miércoles

Al filo de la 1:30 de la tarde de este miércoles se materializó la entrega a autoridades de EEUU de Sergio Neftalí Mejía Duarte, de 40 años. Con él suman 16 los que siguieron el proceso de extradición establecido en el auto acordado.

Mejía Duarte es conocido con los alias de «Neftalí», «El Doctor», “El Cuñado», “El Guapo” y «El Compa», y fue solicitado por el gobierno de Estados Unidos señalado de conspirar para introducir droga a ese país del norte del continente.

Este hondureño es solicitado por la Corte del Distrito Sur de la Florida, Estados Unidos, donde se le presentaron cargos de conspiración para distribuir al menos cinco kilogramos de cocaína con conocimiento e intención de que sería importada hacia territorio de ese país.

Es importante mencionar que la mañana del domingo 20 de agosto de 2017, Mejía Duarte fue capturado en el Valle de Amarateca por agentes especializados de la Policía, tras varios meses de darle seguimiento.

Según las informaciones oficiales, por más de 10 años Mejía Duarte operó en la zona del Valle de Sico, en Colón, junto a los cárteles de Los Cachiros y Wilter Blanco.

Se conoció que el extraditado fue capturado en el Valle de Amarateca, donde para actuar con bajo perfil ingresó como bondadoso feligrés de una iglesia evangélica. Al momento de su captura le decomisaron un fúsil de AR-15 y una pistola.