– Pese a que el 8 de junio Araujo dijo que no regresaría a la titularidad de Salud, este lunes manifestó lo contrario.
El 7 de junio, el mandatario determinó suspender de su cargo a la titular de Salud y nombró una Comisión Interventora integrada por: Salvador Pineda, Luther Castillo Harry y Javier Pastor, éste último viceministro del ramo desde que comenzó el actual mandato presidencial.
Un día después del nombramiento de la interventora, Araujo Araujo anunció que presentaría su renuncia irrevocable al cargo ante el presidente Lobo y que no regresaría más al cargo que ostentó e incluso denunció que familiares del presidente Lobo estarían detrás de su suspensión.
Por su parte, el gobernante, el 11 de junio se volvió a referir sobre la salida de la ministra de Salud, Roxana Araujo, y dijo que se debió a que no fue capaz de resolver el problema del abastecimiento de medicinas en los hospitales públicos, así como el pago a los empleados de la red sanitaria del país.
Pese a los dimes y diretes entre ambos funcionarios, la funcionaria dijo este día que seguirá al frente de esa dependencia del Estado.
Araujo sostuvo una reunión con los miembros de la Interventora en la cual dialogaron sobre los diferentes temas que atañen a la salud, así como la presentación de un informe al presidente Lobo en Consejo de Ministros que se celebra los martes en Casa de Gobierno, pero que mañana se celebrará en Santa Rosa de Copán, occidente de Honduras.
“Mi obligación al cumplirse los 30 días de suspensión es de retornar al frente de la institución, mientras el presidente Lobo defina lo contrario”, insistió.
Al ser consultada si renunciará de la titularidad de Salud, Araujo dijo: “no tengo porque renunciar, el problema de desabastecimiento de medicamentos es un problema que se viene arrastrando desde hace varias años”.
Araujo reiteró que la última palabra la tiene el mandatario hondureño y que sólo él podrá decidir su futuro al frente de la Secretaría de Salud.
