spot_img

Eurovisión, la millonada que «una vez al año no hace daño»

Por:

Compartir esta noticia:

Liverpool (Reino Unido) – Toni, Julia y Pedro no tienen los 36,000 euros que cuesta una entrada de palco para la final de Eurovisión. Su caso es parecido al de los miles de eurofáns que se han desplazado a Liverpool y se han topado con los precios prohibitivos de una ciudad que absorbe los efectos de la burbuja del festival y que provoca un elevado gasto que solo se justifica con el «una vez al año, no hace daño».

«Es una millonada», explica sobre el festival Toni, que ha llegado a Liverpool desde Mallorca acompañado de Pedro y de Julia. «Es mucho dinero, lo más difícil de conseguir es la entrada, pero es que los hoteles, los apartamentos… Era casi imposible conseguir uno que estuviera bien de precio».

Por eso asoma el ingenio. Este tridente balear comenzó a organizar esta edición en cuanto terminó la de Turín, incluso con reservas «por si acaso». «Habíamos hecho reservas en diferentes ciudades y en diferentes semanas antes de que se eligiera Liverpool, para asegurarnos, tirando de muchos alojamientos con cancelación gratuita», asegura Toni.

Los estudiantes, como es el caso de Alejandro, Raúl, Ángela y Ana, han contado hasta el último céntimo. «El vuelo nos ha costado 100 euros a cada uno, ir y venir, el alojamiento, otros 100 por persona y como no encontramos entradas para semifinales o para la final vamos al Eurovillage, que nos ha costado 16 libras», afirma Alejandro.

«Ya nos arrepentiremos el lunes», matiza el grupo de malagueños, al recordar que han dejado de lado los exámenes finales y los TFGs para una «oportunidad única» y que llevan «toda la vida esperando».

«En casa siempre la hemos visto desde que era pequeñita, es un festival que me gusta porque es muy inclusivo», añade Ángela, antes de desvelar que su próximo destino es el McDonalds. «Nosotros baratito, no queda otra, que somos estudiantes».

Las entradas, para cualquiera de los actos, han sido los objetos más preciados del festival, con precios que oscilan desde los cien euros, para las semifinales, hasta los más de 30.000 euros para algunas posiciones en la final.

«Para tener entrada lo que hace falta es suerte o tener 36.000 euros. Esa es la mejor suerte que puedes tener», bromea Pedro, que recuerda la odisea que fue conseguir la entrada que tienen para el ensayo del viernes y que le ha costado 500 euros por persona.

«Éramos seis conectados, uno desde Londres, otro desde Japón, dos desde España… Y fue supercomplicado. Pujamos para la final, para lo de esta noche, que es un ensayo, para las semifinales también y conseguir seis entradas ha sido muy complicado», agrega el mallorquín.

«No es fácil», coincide Adrián, que aterriza en Liverpool desde Sevilla. «Primero tienes que hacerte una cuenta en Ticketmaster, pero en la versión de Reino Unido, por lo que ya necesitas manejar algo de inglés, y luego viene lo peor, la cola. Para la primera remesa de entradas estuve cuatro horas haciendo cola y no conseguí nada. Fue en la segunda cuando tuve suerte», añade este chico de Sevilla, que calcula que se gastará 800 euros en todo el festival.

Y es ahí donde entra su máxima: «Una vez al año no hace daño. No me importa este gasto. Hay gente que va al fútbol y yo vengo a esto».

La marea española, además, confía en que Blanca Paloma repita el éxito de Chanel el año pasado.

«La Loreen esa no tiene que ganar, lo siento, pero no. Blanca Paloma es una artistaza con un registro increíble y con una canción española que va a encantar a los extranjeros», dijo Ángela.

«Creo que hay posibilidades de quedar bien, espero que sí. Venimos a apoyar a Blanca Paloma, aunque no va a ser fácil, porque este año hay mucho nivel. También tenemos que dar gracias a Chanel porque gracias a ella ha levantado esto», manifestó Toni, uno de los tantos españoles que no ha dudado en dejarse «una millonada» para disfrutar de Eurovisión en Liverpool. 

(vc)

spot_img
spot_img

Lo + Nuevo

spot_img
spot_img
spot_img
spot_imgspot_img