La instantánea la hizo el estudiante Fernando Silva (el «Sabinita» de la clase por su parecido con el cantautor español Joaquín Sabina) en una calle de Tegucigalpa sobre la que manos de hombres, mujeres y niños habían elaborado alfombras con motivos religiosos a base de serrín de pino con ocasión de la Semana Santa.
En la foto ganadora un niño observa una alfombra en la que en un extremo estaba escrito el mandamiento «No matarás», mientras que a la derecha y de espaldas resalta en primer plano un agente de la Policía Nacional viendo el mismo mensaje, quizá reflexionando sobre los policías que han asesinado a jóvenes en el país.
Silva, de 19 años, el mayor de tres hermanos y quien se ha vuelto un admirador de la música de Joaquín Sabina desde que uno de sus maestros le dijo en febrero pasado que se parece al artista español, comentó a Acan-Efe que la foto se dio «de lo más normal».
«El policía observaba la alfombra sobre la que pasaría la procesión, luego apareció el niño en el otro extremo a hacer lo mismo. Entonces dije: ¡Esta es la foto!, y quedó perfecta. Sin el niño no hubiera quedado tan buena», expresó Silva muy emocionado por su logro en la profesión que está iniciando y le apasiona.
De «Joaquinito», quien concursó con el pseudónimo «Joaquín de la Cruz», la maestra Leyla Banegas resaltó que, «además, es un excelente alumno que tiene todo para ser un buen periodista».
Para los cinco miembros que integraron el jurado del concurso de fotoperiodismo de la Escuela de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) no fue fácil la elección de las tres fotos ganadoras, más una que fue merecedora de mención honorífica.
«La fotografía del primer lugar estéticamente no es bonita, pero tiene un importante valor informativo porque el alumno leyó bien la imagen», dijo el fotógrafo Gustavo Amador, de la Agencia Efe, quien fue uno de los miembros del jurado.
El director del diario La Tribuna, Adán Elvir, cuyo medio le otorgó un trofeo a Fernando Silva, dijo a Acan-Efe que «no fue fácil elegir la mejor foto periodística porque en su mayoría eran muy buenas», pese a que ninguno utilizó cámara profesional.
Agregó que el ejercicio «dejó una buena enseñanza al jurado», que durante dos horas y media analizó la veintena de fotografías que participaron en el concurso.
Los otros fotógrafos de agencias internacionales de prensa que integraron el jurado son Estalin Irías y Jorge Cabrera.
Amador señaló que en la muestra había «bonitas fotos», pero que periodísticamente la ganadora marcó una diferencia por el mensaje de «no matarás» que el niño y el policía están viendo al mismo tiempo.
De no haber sido por su «rebeldía», Fernando Silva (19 años) quizá ahora fuera estudiante de arquitectura o medicina, lo que prefería su padre, Nelson Silva; en tanto que su madre, Martha Alicia Cruz, deseaba verlo todo un ingeniero civil, nada de periodismo «por el peligro que conlleva esa profesión».
«Sentí que esa era mi pasión, el periodismo. No encontré mejor forma de ayudar a los demás», dijo el ganador del concurso de fotoperiodismo en la UNAH, cuya premiación se celebró en el marco del IX Festival Interuniversitario Centroamericano de la Cultura y el Arte (FICCUA) 2015, que concluyó el viernes en Honduras.
Honduras vive una violencia criminal que a diario deja unos 16 muertos, según cifras de organismos de derechos humanos.
Algunos de los crímenes han sido cometidos por elementos de la Policía Nacional, institución que está en proceso de depuración desde hace cuatro años, aunque diversos sectores consideran que la limpieza no se está haciendo de la mejor forma.
Uno de los crímenes cometidos por policías, en Tegucigalpa, se registró el 22 de octubre de 2011 contra dos estudiantes universitarios, Rafael Alejandro Vargas (22 años), hijo de la rectora de la UNAH, Julieta Castellanos, y su amigo Carlos David Pineda (23).