Londres – El príncipe Guillermo, heredero al trono británico, recibió 22,9 millones de libras (unos 27 millones de euros) del Ducado de Cornualles en el ejercicio fiscal 2024-25, un 3 % menos que en el periodo anterior, según el informe anual publicado este lunes sobre la finca del suroeste de Inglaterra.
Este dinero, descrito cómo «excedente distribuible» en la hoja de resultados, se destina a financiar su actividad oficial, benéfica y privada, así como la de su esposa Catalina y sus tres hijos.
El descenso en el periodo hasta el 31 de marzo de 2025, respecto al de 2023-24, se debió en parte a la venta de una propiedad comercial y el aumento de los costes operativos, señala el documento difundido por el palacio de Kensington, residencia oficial en Londres de los príncipes de Gales.
El informe precisa que, si bien el ducado no paga impuesto de sociedades -al no considerarse una empresa como tal sino una institución hereditaria creada en 1337 para financiar al heredero-, el duque sí abona «el tipo más alto del impuesto sobre la renta» sobre los beneficios de su explotación anual.
No están gravados los activos de la finca, valorados en más de 1.100 millones de libras (1.285 millones de euros) y que comprenden unas 52.000 hectáreas de terreno en 19 condados sobre todo en Inglaterra pero también en Gales, con unas 200 granjas arrendadas y dos zonas urbanizadas.
Durante el último año, el Ducado de Cornualles, que Guillermo heredó cuando su padre se convirtió en el rey Carlos III, invirtió más de 10 millones de libras (unos 11,7 millones de euros) en desarrollo comunitario y 2,8 millones (3,26 millones de euros) en programas ambientales, indica el texto.
Uno de los proyectos más destacados es la construcción de 24 viviendas para personas sin hogar en el desarrollo urbanístico de Nansledan (suroeste inglés), en colaboración con la organización benéfica local St Petrocs, dentro del programa real Homewards de apoyo a los sintecho.
Otras iniciativas incluyen los premios medioambientales Earthshot, liderados por Guillermo, y el Centro para la primera infancia encabezado por Catalina, que el pasado octubre regresó a las labores públicas tras varios meses de convalecencia por cáncer.
En el ámbito medioambiental, el ducado redujo sus emisiones un 6,9 % respecto al nivel de referencia de 2019/20, gracias a prácticas agrícolas regenerativas, restauración de más de 800 hectáreas de turberas degradadas y mejoras energéticas en los edificios, apunta el documento.
El ducado cuenta con 200 empleados, mientras que la oficina de los duques de Cambridge tiene 68, de los cuales un 70,6 % son mujeres y un 13,2 % de minorías étnicas.
El informe, que se presentará ante el Parlamento, concluye que el Ducado de Cornualles avanza hacia un modelo de liderazgo que «busca equilibrar la rentabilidad con la responsabilidad social y medioambiental a largo plazo». JS