
Estoy de acuerdo que el presidente de la República debe tener un presupuesto para implementar el desarrollo de su equipo de apoyo en casa de gobierno y los programas específicos que desee emprender, sin embargo, la partida presupuestaria debe ser totalmente transparente y con el ejercicio de rendición de cuentas; en los países asiáticos he observado como son juzgados y posteriormente llevados presos a los funcionarios de gobierno por no cuadrarles los presupuestos asignados y por el mal uso de ellos, que en muchos casos son objeto hasta de penas más severas.
En nuestro caso, tenemos una nación que no puede despegar del subdesarrollo, no por falta de recursos naturales ni por recursos financieros sino más bien por la poca planificación estratégica y por no impulsar proyectos en donde se desarrollen los indicadores de crecimiento económico; lo anterior está muy ligado al nombramiento de funcionarios leales a mantener in status quo en beneficio de una minoría y no de las grandes mayorías, esta historia la hemos visto una y otra vez.
La clase política en general aún no ha podido implementar un verdadero plan de desarrollo sostenible de país en donde la conservación de los recursos naturales sea la base que lo impulse logrando obtener y utilizar los beneficios de la conservación de estos recursos renovables; hoy más que nunca necesitamos un gobierno planificador del que hacer a: corto, mediano y largo plazo.
En relación a la ejecución de los presupuestos, estos por tradición han sido otorgados con criterios de operatividad según la secretaria de estado y la carga de empleados por cada una, lo cual me parece prefecto, sin embargo en algunos casos estas tienen que ver con la regulación y manejo de los recursos naturales y deben ser ampliados para tener presencia en el todo el país, lo anterior servirá para regular y administrar los recursos naturales como ser: los bosques, el agua, la vida silvestre, las áreas protegidas, la biodiversidad y la conservación del potencial turístico de la nación.” El buen manejo de los recursos naturales nos asegura la producción y productividad, es algo parecido a una relación en donde A=B+C, es algo que no han querido y podido entender”.
“En relación a la partida confidencial la población no entiende en general la razón por la cual esta partida es tan alta si la instancia en referencia no es operativa u/o ejecutoria como otras instituciones”, solamente con una gran cantidad de logros y resultados por una intensa gestión, podría ser muy razonable; pero en la realidad se ha visto más como un excesivo gasto de recursos financieros que pudieron ser mejor utilizados en otras instancias operativas.
Resulta ofensivo que el ciudadano presidente tenga una partida confidencial exageradamente alta sin tener un presupuesto especifico en que se invertirá tan abrupta cantidad de recursos, en ese sentido, la actual administración ejecutó 41545,700.00, casi de 42 mil millones de lempiras en los cuatro años de gobierno, (análisis hecho por la ex presidenta del Colegio Hondureño de Economistas (CHE), Liliana Castillo), un presupuesto que me parece muy alto y con el ingrediente de no rendir cuentas, mientras en los centros hospitalarios públicos hay una problemática sin resolver y en donde la frase del día es “NO HAY” y regrese dentro de: dos, tres o más meses por falta de recursos financieros.
Así por el estilo se pueden enumerar una cantidad de situaciones de orden público complicadas sin resolver y en donde por falta de recursos financieros no hay una respuesta rápita y que por lo menos ayude a disminuir el impacto negativo en la población, este panorama no ha sido exclusivo de la actual administración, casi todas han gozado de este privilegio que ha criterio de muchos debería ser de acuerdo al Plan de Acción propuesto por el ente rector.
Las comparaciones son malas pero en éste caso debemos poner de ejemplo lo que está haciendo nuestro vecino país, La República de El Salvador, en donde bajo la consigna “el dinero ajusta cuando nadie roba” , nación que está sentando las bases de una gestión que muy pronto despegará del sub desarrollo, hay que aceptarlo con humildad y seguir el ejemplo, ningún país se desarrollará en donde los secretarios y diputados gastan estos recursos en cosas de índole personal como: presto barbas, cacahuates, alimentos, guaro, vinitos, bocadillos, viáticos, cervecitas, agua mineral, viajes, aumentos de salario sin justificación…etc.
No voy a decir algo que la población sabe, pero tengo que dejar constancia que todos nos hacemos las siguientes preguntas: ¿en qué gasto tanta plata?, ¿Dónde están las inversiones?, ¿cuáles son los proyectos que el ejecutivo desarrollo?, en fin … una triste historia, al final se entiende porque se miente y se desprestigia un partido con otro, pues se trata de subirse a este árbol de la bonanza y cambiar su estilo de vida, sin tener que rendirle cuentas a nadie, es como vivir los sueños o estar en el mundo de las maravillas.
El pueblo hondureño debe salir de las penumbras o de las cuevas en donde nos tienen inmersos, la deficiente e ineficiente implementación de los recursos financieros que se les asignan no solo a nivel del ejecutivo y todas las secretarias del estado deben de terminar, necesitamos una eficiente ejecución del gasto público y terminar de una vez por todas de mal utilizar los recursos aportados por el pueblo en concepto de: impuestos, tasas y otros asuntos de carácter personal.
No estoy de acuerdo con algunos anuncios publicitarios que se instalaron en casi todo el país en donde se dice que el ejecutivo si cumple, no puede ser: que se invierta cantidades exageradas en canchas de futbol, helicópteros de última generación, vehículos blindados, carros a granel, seguridad privada… etc. mientras existe una población sufriendo por: falta del equipo necesario para atender a los pacientes enfermos del riñón, con una alta mora quirúrgica, escuelas cayéndose a pedazos, pueblos productivos sin las vías de comunicación, y otras deficiencias en el sector de salud público.
Honduras, debe hacer cambios profundos en la administración pública, en la asignación de los presupuestos, principalmente, el del ejército, los batallones no solo deberían ser utilizados para la instrucción militar; la educación es fundamental retomarla y el trabajo en la sostenibilidad en la producción de alimentos, debería ser integral de tal forma que el individuo que egrese de esta institución reciba una mejor formación: académica, técnica y el conocimiento en actividades productivas, un ser humano preparado para proteger la soberanía y para ser un agente de cambio en la sociedad.
En general, existen dos grandes problemas en relación al gasto público, el primero es la implementación en actividades improductivas y el segundo es el gasto del mismo al capricho del titular, ambos tienen varios factores en común, siendo estos: la deficiente planificación e implementación del mismo y el segundo es la falta de rendición de cuentas.
El nuevo gobierno debe de trabajar en mejorar estos dos aspectos para poder visualizar un posible despegue al desarrollo sostenible de la nación, no podemos seguir en la improvisación jugando a la política revolucionaria y culpando a otros por lo que tienen, el trabajo es impulsador de mejores niveles sociales y financieros, en una nación en donde se estrangula a la empresa privada provoca lo que ya observamos, la fuga de más de 30 maquilas del sector norte, el cierre en la zona sur de la industria camaronera, melonera y otras.
Hay que construir el futuro, en Honduras lo tenemos todo y en algunos aspectos hasta de sobra, pero debemos consolidar un Plan Nacional de Desarrollo, en donde se evalúen por medio de indicadores de índole social y económico que mejoren el estado como tal y las condiciones de vida de la población. De seguir así, estaremos construyendo un ambiente propicio para una hambruna, lo cual seria ridículo por estar en una nación rica en recursos naturales.
Los que se benefician del desorden administrativo y la improvisación están bien, porque muy probablemente obtienen más de un beneficio tangible, mientras hay una gran parte de la población que se desangra y pierde las esperanzas de por lo menos obtener un trabajo digno; ya basta de tantas tonterías ideológicas y suban el nivel a la calidad de vida de la población, lo anterior solo se logra con el apoyo de un trabajo productivo y digno.
Finalmente debo de decir, que no somos pobres, caminamos sobre los recursos que nos pueden dar solvencia económica y bienestar social, pero si sigues o si te subes en un burro, éste te llevará hacia un abismo y a situaciones complicadas, elaboremos un Plan Nacional de Desarrollo en base al adecuado manejo de los recursos, consultemos a los más capaces, a las universidades; no nos creamos que tenemos el don de la sabiduría del universo si no conocemos las aulas universitarias.
¡Si no sabemos, Preguntemos!, es mejor pasar por burro un minuto que toda la vida decía muy sabiamente mi abuela, la pena y la vergüenza solo debe ser para el delincuente. Los hondureños merecemos mejores destinos, así que el que gane no cometa el error de los anteriores, creyéndose la mamá de tarzán, el destino de toda una nación está en vuestras manos.
Ya seremos más de 10 millones, la moneda se ha devaluado, no hay empleo, la energía es la más cara de centro América, tenemos una población joven, una alta deforestación, los recursos están degradados, compromisos internacionales sin cumplir…etc. el panorama no es muy bueno, pero hay soluciones a todos con una eficiente y acertada administración pública.
Debo de decir en honor a la verdad que hemos tenido presidentes universitarios, pero desafortunadamente se fueron por el lado oscuro, sabiendo que tarde o temprano la verdad sale a flote, creo que hay personas que sin haber tenido una formación universitaria tienen más valores y principios que cualquier profesional con excelencia académica, esas personas existen y hay que buscarlas y darles el puesto que merecen, solo con personas con valores podremos salir adelante.
En Honduras hay hombres y mujeres inteligentes, allí están esos recursos humanos y hay que aprovecharlos, estoy seguro que si los escuchan pronto podemos salir de este fango apestoso en donde nos tienen. Ya estamos cansados de estar escuchando frases gastadas de movimientos revolucionarios fracasados, generemos fuentes de trabajo, apoyemos a los jóvenes con los recursos financieros y los sistemas de comunicación para que puedan ser competitivos mañana.
Debemos despolitizar el sistema educativo nacional, todos sabemos que al interior de los centros educativos ciertos docentes “instruyen” a los jóvenes en temas políticos, esto está generando una clase privilegiada de alumnos que no pasan el año por ser brillantes sino más bien porque forman parte de grupos afines a una línea partidaria, esto no puede seguir así, necesitamos más ciencia y menos política en los centros educativos.¡Podemos salir adelante!, Adelante…el pueblo ha hablado y está respaldando la nueva gestión, ¡queremos un cambio para el bien de todos, respetando el estado de derecho!






