Giuliani, de 65 años, que durante varios meses se especuló que retaría a la senadora por Nueva York Kirsten Gillibrand o al gobernador David Paterson, ambos demócratas, convocó a una rueda de prensa para informar además que apoyaría al ex congresista Rick Lazio, de 51, para la gobernación del estado.
El controvertido ex alcalde y ex fiscal afirmó en conferencia de prensa junto a Lazio que está muy ocupado en sus negocios en la firma de abogados y de asesoramiento para aspirar en este momento a otro cargo público, y aunque no tiene previsto hacerlo en un futuro inmediato, tampoco cerró las puertas.
Entre los compromisos adquiridos por Giuliani está su reciente contrato como consultor para las Olimpiadas en Río de Janeiro (Brasil) en 2016.
«Hubiera disfrutado aspirando a un cargo público, pero no es el momento adecuado», afirmó.
De acuerdo con Giuliani, Lazio, que anunció que aspira a gobernador el pasado septiembre, puede traer a Nueva York lo que el estado necesita y recordó su experiencia en el sector financiero y como congresista.
Lazio, aseguró Giuliani, «entiende la necesidad de reducir el gasto público sin imponer impuestos y crear un buen ambiente para los negocios».
Aseguró además que el aspirante republicano a gobernador «inspira confianza y credibilidad» y puede ayudar a crear empleos y mejorar la economía del estado.
El ex alcalde, que señaló durante la concurrida conferencia de prensa que tomó su decisión alrededor del día de Acción de Gracias, indicó que el ex congresista está «muy bien preparado» para ser gobernador y que participará en su campaña así como en la de otros posibles aspirantes republicanos.
Lazio, que fue congresista por Nueva York de 1993 a 2001, fue el rival de Hillary Clinton por la contienda al Senado de EEUU para sustituir a Patrick Moynihan, luego de que Giuliani desistiera de ser candidato tras diagnosticársele cáncer de próstata.
El ex congresista agradeció el apoyo del ex alcalde.
El gobernador Paterson ha dicho que buscará el próximo año la nominación demócrata a gobernador a pesar de que, según encuestas, no contaría con el apoyo de los electores, que tienen una actitud más positiva hacia el ahora fiscal general, el demócrata Andrew Cuomo.
Nueva York celebrará elecciones para la gobernación en noviembre de 2010.
