Estambul – Las misiones diplomáticas de Estados Unidos en Turquía reanudarán la emisión de visados a un ritmo normal, dando por cerrada así la crisis abierta en octubre tras la detención de un empleado consular, informó hoy la embajada estadounidense en Ankara.
«El Departamento de Estado confía en que la situación de seguridad ha mejorado lo suficiente como para permitir la reanudación plena de los servicios de visado en Turquía», indicó la embajada en su cuenta oficial de Twitter.
En este sentido, destaca que «desde octubre, el Gobierno turco ha cumplido las garantías de alto nivel de que no se está investigando judicialmente a otros empleados locales» de la embajada o el consulado y que «no se les arrestará por cumplir con sus deberes oficiales, incluida la comunicación con altos cargos turcos que actúan también en su capacidad oficial».
A principios de octubre pasado, un tribunal turco decretó prisión preventiva para un veterano empleado local de la embajada estadounidense, bajo la acusación de mantener vínculos con miembros de la cofradía del clérigo islamista Fethullah Gülen, al que Ankara responsabiliza del fallido golpe de Estado de julio de 2016.
La embajada respondió a esas acusaciones aseverando que los interlocutores sospechosos del acusado eran en ese momento aún altos cargos de la Policía turca, por lo que las comunicaciones formaban parte del deber profesional del empleado.
El tuit de hoy reitera también que Turquía informará a la embajada si planifica arrestar a empleados locales de las misiones estadounidenses.
Un acuerdo en este sentido se había hecho público a principios de noviembre pasado, pero EEUU solo retomó de forma limitada la emisión de visados, interrumpida el 6 de noviembre, y la semana pasada, la embajada anunció que las primeras citas disponibles para solicitar un visado serían en enero de 2019.
Aunque ahora da por cerrada la crisis, la legación recuerda que sigue «seriamente preocupada» con las acusaciones contra sus empleados arrestados, así como «por los casos de ciudadanos estadounidenses detenidos en Turquía bajo el estado de emergencia», en lo que parece una alusión al pastor evangélico Andrew Brunson, en prisión preventiva desde octubre de 2016.
«Los altos cargos estadounidenses seguirán en contacto con sus interlocutores turcos para buscar una solución satisfactoria a estos casos», concluye el mensaje en la red social.
En respuesta a esta decisión la embajada de Turquía en EEUU también ha levantado las limitaciones a la emisión de visados a estadounidenses.
