En una entrevista con la junta editorial del diario Chicago Tribune, Myers dijo que el control de las empresas consideradas negligentes y culpables de conducta criminal será prioritario, antes que tome posesión en enero el próximo presidente de los Estados Unidos.
Según el Tribune, el ICE ha sido criticado por los defensores de los indocumentados porque es tolerante con los empleadores, mientras persigue agresivamente a los indocumentados.
Myers dijo que desde octubre se realizaron 4.100 detenciones, de las cuales 900 resultaron en acusaciones criminales.
Dijo que 92 empleadores o gerentes de empresas enfrentaron cargos.
«Antes eran solamente cargos administrativos, y a menudo la multa por contratar indocumentados era menor que lo que se cobra por una violación de tránsito», agregó.
Myers dijo que las multas contra los empleadores superarán este año los 30 millones de dólares recaudados en el 2007.
Además de los cargos criminales, que pueden demandar meses de investigaciones complicadas, Myers dijo al Tribune que su agencia trata de persuadir a las empresas para que «cumplan voluntariamente» con las disposiciones legales.
